En un mundo
globalizado, la tecnología es algo más que una realidad. Se ha convertido en
una necesidad competitiva que ha cambiado la forma en la que trabajan y
producen las empresas, así como sus fórmulas de formación y comunicación, tanto
interna como externa. Pero ¿qué beneficios concretos tienen las herramientas
digitales en materia de salud? The Valley Digital Business School señala que
los efectos más destacados se sitúan en los niveles de compromiso y retención
del talento, motivación de los trabajadores y, por tanto, de su productividad
en la empresa.
Expertos de The
Valley Digital Business School han identificado 6 ventajas que tiene el uso de las nuevas tecnologías en materia de
salud laboral y productividad, empezando por la flexibilidad laboral, principal demanda de los jóvenes a la hora
de decidirse a trabajar en una empresa,
y la reducción del estrés, la causa más citada a la hora de solicitar una
baja laboral.
Y es que las TIC están contribuyendo a reducir e, incluso, eliminar
el estrés al permitir a los
empleados trabajar de una forma diferente: con más libertad, flexibilidad y
facilitando una comunicación más eficiente y fluida.
De hecho, el
teletrabajo ya es una solución efectiva para conciliar la vida laboral y
personal, la segunda de las demandas más solicitadas en las encuestas de
generaciones como los Millennials. Todo y pese a que, según las estadísticas de
Eurostat, en España, sólo un 7,5% de los empleados confiesa trabajar desde casa
o hacerlo de forma ocasional. Países como Alemania o Reino Unido tienen esta
práctica mucho más desarrollada.
Además, está demostrado que herramientas como las
videoconferencias o la comunicación simultánea online supone un ahorro en
cuanto a desplazamiento y fomentan la implicación del empleado y el trabajo en
equipo, optimándose así la salud y bienestar laboral.
La segunda de las
mejoras se enfoca en la prevención de riesgos laborales a través del análisis
de datos. El Big Data supone una excelente herramienta de predicción de
accidentes en el trabajo, así como un mecanismo para examinar el estado actual
de la Seguridad y Salud laboral en España. Además, la Organización
Internacional del Trabajo impulsará este año 2017 la necesidad de esta recogida
de información.
En tercer lugar se
sitúa una de las cuestiones que más preocupa a los empresarios del siglo XXI,
por sus efectos en los niveles productivos: la motivación.
The Valley recomienda
invertir en formación y acciones que aumenten la participación del empleado en
las decisiones de la organización, con el fin de incentivar a los
trabajadores. Es importante que, en este proceso, las compañías midan el
rendimiento laboral de los grupos de trabajo y, para ello, las aplicaciones
digitales se han convertido en la herramienta idónea para hacerlo.
Por otro lado, medir esta implicación requiere disponer de plataformas digitales donde los
trabajadores puedan aportar su visión personal sobre aspectos
profesionales, intercambiar puntos de vista con otros compañeros y recibir
formación online sobre cuestiones relacionadas con sus competencias o en cuanto
a prevención de riesgos.
Otro de los
beneficios que ha traído la tecnología es la posibilidad de anticiparse a los
errores. La utilización de aplicaciones en tablets o smartphones destinadas
al registro de datos a nivel interno de la empresa, permiten remitir las
observaciones de forma rápida y cómoda, tomar fotos con el mismo dispositivo,
enviar de forma inmediata el informe a los destinatarios pertinentes y recibir
la alerta cuando se haya resuelto el problema.
Todo este proceso conlleva menor probabilidad de errores y
muchísimo menos tiempo de gestión en comparación con los procedimientos
tradicionales.
Asimismo, en quinto
lugar, está la minimización de riesgos laborales. En este sentido, los drones se están convirtiendo en
instrumentos muy útiles para la vigilancia y control del cumplimiento de las
medidas de prevención, supervisión de actividades en zonas peligrosas o
transporte de material. Lo mismo ocurre con el control remoto, que exime al trabajador de la realización de
ciertas tareas peligrosas.
Por otro lado, los sensores,
sistemas inteligentes de bajo coste que monitorizan y detectan posibles
accidentes, también están ayudando en la prevención de incidentes laborales.
Finalmente, dentro de esta tarea preventiva, cierra el TOP 6 la posibilidad de simular
tareas peligrosas o el uso de maquinaria compleja.
El 2D, 3D o realidad virtual/aumentada para el entrenamiento
con equipos o vehículos industriales ayuda a mejorar la utilización de dichos
aparatos y reduce, de tal modo, la posibilidad de que ocurra un error humano,
causa principal de accidentes en el uso de esta maquinaria industrial. Además,
estos dispositivos permiten practicar las habilidades del trabajador en
situaciones de riesgo más habituales (obstáculos imprevistos, inclemencias
climatológicas...).
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