Experiencias

Rodolfo Salas: Facilitador y potenciador sobre conocimientos de liderazgo, estrategia, marketing y gestión de los negocios.

Fortalezas: Dirigir, inspirar e integrar a otros con una gran energía, Aceptar cambios de forma positiva, Desarrollar relaciones con otros, Ser más visible y Tener un alto grado de compromiso.

jueves, octubre 31, 2019

20 trucos para aumentar la motivación de tus empleados

Un empleado motivado es sinónimo de satisfacción laboral, engagement y productividad. Cuando la fuerza laboral ha pasado a ser el epicentro de las compañías que buscan diferenciarse por el talento que aglutinan, es interesante repasar qué estrategias y políticas de RRHH reman a favor de una mayor motivación y felicidad en el puesto de trabajo, algo a lo que ahora contribuye también Edenred, que ha editado recientemente la guía "20 trucos para incrementar la motivación en el trabajo".

Si quieres contar con una plantilla cohesionada y motivada, toma nota de los consejos que Edenred recoge en su guía.

  1. Reconoce el buen trabajo. El reconocimiento al trabajo bien hecho es una de las vitaminas más potentes para mantener la motivación. Los logros deben ser celebrados, más allá de las recompensas económicas previamente acordadas  (bonos, comisiones, aumentos, etc.). En un equipo, dedicar tiempo a celebrar los hitos y a poner en valor el tiempo y esfuerzo empleados ayudará a generar confianza, unión. 
  2. Establece metas cortas y medibles. Los proyectos que se alargan en el tiempo son muy desmoralizantes. Como profesionales, necesitamos tener la sensación de finalizar tareas y evaluar su resultado. Sólo así podremos otorgarle un significado a lo que hacemos. Para ello, introduce metas cortas y medibles. Este feedback continuo impulsará tu motivación ya que verás reflejado el resultado de tu trabajo.
  3. Escucha. A ti mismo, a tu equipo, a tus superiores… Escuchar te permitirá entender mejor a los que te rodean y hacerles sentir valorados. Esa sensación puede ser un estímulo positivo en tu día a día.
  4. Piensa siempre en positivo. La felicidad en el trabajo y un ambiente positivo tienen un gran impacto en el futuro de tus proyectos. Teniendo en cuenta esto, adopta siempre un pensamiento que dé más importancia a aquello que salió
    bien que a los fallos cometidos.
  5. Mantente bien alimentado. Mantener unos altos niveles de energía en el cuerpo es fundamental si queremos rendir en nuestro trabajo. Sin una alimentación sana y equilibrada, nuestra capacidad de atención y productividad se ven muy afectadas. Durante la jornada laboral intenta realizar comidas de fácil digestión y bajas en grasas. Ten siempre a mano snacks sanos como fruta o frutos secos y, sobre todo, hidrátate. ¡No te olvides de tener siempre el agua a mano!
  6. Realiza descansos regularmente. Hacer pequeñas pausas es fundamental para mantener la motivación. ¿Por qué? Porque nos ayudan a relajarnos y evitar que caigamos en el aburrimiento con nuestras tareas; nos permiten retener la información generada durante el trabajo, y nos invitan a reevaluar viejas ideas y a generar otras nuevas.
  7. Mantente en forma. A parte de nuestra alimentación, nuestroestado físico juega un importante papel en nuestra motivación. Una persona en buena forma es mucho más activa, se siente más fuerte y, por lo tanto, se ve capaz de sacar el trabajo adelante más fácilmente. Este componente físico y psicológico es clave para dar lo mejor de nosotros mismos. No lo dudes y haz deporte al menos dos veces por semana. Si no tienes tiempo para ello, evita permanecer muchas horas sentado, intenta caminar todo lo que puedas y olvídate del ascensor.
  8. Encuentra tu propósito profesional. Sentirnos a la deriva profesional es, sin lugar a dudas, una de las sensaciones más desmotivadoras dentro de la vida laboral. Para evitarlo, trata siempre de dar sentido a tu trabajo. Plantéate si es lo que realmente quieres y si estás en el lugar donde te gustaría estar. Si crees que no es así, quizás debas empezar a pensar en introducir algún cambio en tu vida profesional.
  9. Se transparente. Cualquier persona que trabaje junto a ti, ya sean compañeros, empleados, socios o clientes; agradecerán tu sinceridad y honestidad. De este modo, estarás construyendo con ellos una relación de confianza que a la larga resultará muy satisfactoria.
  10. Se claro y conciso. Cuando trabajas con un equipo es fundamental que la comunicación, en todas direcciones, sea fluida, clara y precisa. De este modo, todas los integrantes saben qué es lo que se espera de ellos y reciben feedback de su trabajo.
  11. Visualiza tus metas y compártelas. Para mejorar la motivación y la productividad, no hay nada mejor que visionar las grandes metas y compartirlas con el equipo de trabajo. Exteriorizar y visualizar el objetivo final contagiará al grupo y hará que todos se sientan parte del proyecto.
  12. Actualiza tus conocimientos y habilidades. Acude a formaciones, haz cursos, practica un nuevo idioma… Aprender y aumentar tus aptitudes te ayudará a estar mucho más seguro de ti mismo y a desempeñar mejor tus tareas diarias.
  13. Disfruta de mayor autonomía. Sentir que gozas de cierta autonomía es una fuente de motivación. Nos recuerda el propósito de nuestro trabajo, elimina esa sensación de control que puede desalentarnos y activa nuestra creatividad. Esta autonomía debe ser recíproca entre todos los miembros del equipo de trabajo.
  14. Proporciona sensación de seguridad. Normalmente, el trabajo y el salario cubren las necesidades básicas de alimento y refugio. Sin embargo, según la jerarquía de Maslow, el sueldo también nos aporta bienes intangibles como seguridad, sentido de pertenencia, estima… Así, para poder mantenernos motivados, necesitamos
    deshacernos de ciertas preocupaciones y sentirnos seguros en nuestro trabajo.
  15. Genera confianza en el equipo. La confianza es esencial para mantener la motivación alta en cualquier equipo de trabajo. En este sentido, el lenguaje corporal puede ser un buen aliado. Tu postura dice mucho de tí, así que adopta una que transmita una actitud positiva y abierta.
  16. Incentiva el trabajo colectivo. Un todo es más que la suma de sus partes. Es decir, trabajar dentro de un buen equipo puede ser una fuente de energía positiva. Cuando la motivación de uno de los miembros decae, el resto sirve de apoyo para que todos vuelvan a dar lo mejor de sí mismos.  Aprovéchalo y trabaja las relaciones dentro de tu equipo. Existen numerosos ejercicios que fomentan esa unión, aumentan la cohesión y la productividad del conjunto.
  17. Ofrece beneficios sociales. Los beneficios sociales son prestaciones, al margen del salario, que las empresas ofrecen a sus empleados con la finalidad de mejorar su calidad de vida o de las personas a su cargo. Estas compensaciones han demostrado ser una herramienta clave para aumentar la motivación y la productividad en el entorno empresarial. Además, también reducen el absentismo y atraen talento. Entre los beneficios sociales más demandados encontramos los seguros médicos, tickets de comida, transporte o ayudas para guarderías.
  18. Cambia el escenario de trabajo. La rutina aburre y el entorno de trabajo se hace pesado cuando no existe la posibilidad de cambios. Para solucionarlo, trata de variar el mobiliario de vez en cuando o, si puedes, trabaja desde un espacio nueva. Este soplo de aire fresco será un impulso para tu motivación.
  19. Relájate. Saber reducir el estrés y tomarse un tiempo para relajarse es una excelente solución a la desmotivación. Para lograrlo, es primordial localizar qué es lo que está generando esa sensación negativa y actuar en consecuencia. También puedes prevenirlo siendo más organizado, manteniéndote en buena forma física y realizando ejercicios que te ayuden a desestresarte. Un paseo fuera de la oficina o una serie de respiraciones profundas pueden ser suficientes para lograrlo.
  20. Diviértete. Regla maestra. Disfrutar de tu trabajo es esencial para que desees que lleguen los lunes y que nunca te falte motivación. No todas las tareas que realices serán de tu agrado, pero intenta divertirte en el trabajo lo máximo posible.


miércoles, octubre 30, 2019

Galletitas. Probó, fracasó, volvió a intentar y hoy factura $19 millones

Carlos Deandrea era ejecutivo de una multinacional y se aventuró como empresario pyme; tuvo una primera experiencia fallida y volvió a empezar

En cine, hay una estructura narrativa que se conoce como "camino del héroe", en el que un protagonista recibe un llamado a la aventura que lo pone a prueba hasta que logra un aprendizaje. En la Argentina, hay todo un género que podría llamarse "camino del empresario pyme" e incluye, en algunos casos, idas y venidas con la AFIP, concursos de acreedores y quiebras, juicios y, finalmente, un renacer. Esta es la historia de Carlos Deandrea, un emprendedor que probó, fracasó y volvió a empezar.
El guion de esta película no empieza muy distinto de otras de emprendedores. Deandrea era un ejecutivo con un cargo regional en una gran empresa de consumo masivo cuando decidió dejar de trabajar en relación de dependencia. Estaba cansado de viajar mucho y tener poco tiempo para pasar en familia.
El nacimiento de su segunda hija fue su inspiración. Cuando armaba el cuarto de la nena con su mujer, se dieron cuenta de que había una oportunidad de negocios en una mueblería dedicada exclusivamente a las habitaciones infantiles.
Así nació El círculo de las vitaminas, su primer proyecto. Fue en 2001 y comenzó con ayuda de su mujer, su socia en el proyecto. Crecieron rápido. Del primer local de Martínez, pasaron a otro en un shopping y sumaron dos más en Capital Federal. El quinto iba a ser en España. Hasta que en 2009 se estrellaron.

El local de El círculo de las vitaminas que queda en pie en Martínez; la compañía quebró, pero preservaron la marca y armaron otra sociedad

La primera señal fue en 2007, dos años antes de la debacle. Deandrea y su mujer vendieron su casa para invertir en el negocio y pagar algunas deudas. Seis meses después, en medio de una caída de las ventas, se quedó sin casa, pero con más deudas.
En 2008 el escenario de la macro argentina ya era otro, en medio de una crisis financiera internacional. Las deudas crecían y la tensión adentro de la familia, también. "En medio de la crisis, uno de nuestros hijos empezó a tener problemas de aprendizajes. Averiguamos con una psicopedagoga, nos hizo varias entrevistas y nos dio el diagnóstico: 'Su hijo está perfecto, el problema es que lo están arruinando ustedes con todo el lío que tienen'", relata. En 2009, la sociedad quebró.
Enseguida comenzaron a llegar los juicios de exempleados. Llegaron a tener 60 personas a cargo. La decisión fue conservar la marca, cambiar la sociedad y seguir, pero con una estructura mucho más chica: sin gente a cargo, con un único local en Martínez que hasta el día de hoy maneja su mujer.
De esa quiebra, Deandrea aprendió varias lecciones. " El problema fue que yo tenía una pyme. Y esto es la Argentina. Facturaba todo, hasta lo más mínimo que salía del local, y no tenía al gerente de Finanzas o al de Recursos Humanos para delegar", dice.
De esa primera experiencia traumática aprendió a no expandirse demasiado rápido, a mantener todos los costos fijos lo más bajos posibles y, lo más importante, a no crear más negocios junto a su mujer. Hoy siguen juntos en el amor, pero separados en los negocios.

Volver a empezar

Fines de 2009. Deandrea ya dio un paso al costado en su emprendimiento de muebles y está pensando qué va a hacer de su vida. Mientras, siguen los juicios de exempleados y las deudas. Su mujer le ruega que vuelva a la relación de dependencia, que vuelva a un ingreso estable. Y él no accede.
En marzo de 2010 empezó su nuevo proyecto, la empresa Secretos de mi país. En ese momento, recuerda, varios le dieron la espalda. "Al principio me ayudaron muchos amigos y familiares. A todos les gusta ver a alguien que crece. Pero cuando alguien se funde todos piensan: 'Ni loco invierto en este pibe de vuelta'", recuerda.
Así que arrancó con un plan de negocios de bajo costo: contactó a un panadero de Gualeguaychú que fabricaba unos bizcochitos de grasa similares a los "libritos" que se venden en las panaderías porteñas, pero de tamaño mucho menor. Los bautizó " rianitos" y empezó a venderlos en bolsas plásticas transparentes a las que les abrochaba un cartón con la marca, que había diseñado con ayuda de uno de los pocos amigos que en ese momento lo apoyaban.

Así son los "Rianitos" que fabrica la empresa de Deandrea, una especie de "libritos" en tamaño miniatura

Compró la producción del panadero y le prometió pagarle a 90 días. Aprovechó sus contactos de sus tiempos de empleado de empresas de consumo masivo. Se acercó a las cadenas de supermercados grandes hasta que una confió en su producto. Así le pagó al panadero y siguió produciendo.
Luego lanzó líneas de galletitas y, hace dos años, comenzó a fabricar unos " picos", una especie de galletita de picada muy popular en España. "Como empresario pyme yo sabía que no puedo lanzar unas pepas, porque ahí la competencia ya está. Para fabricar este nuevo formato, me fui a buscar una máquina a Córdoba, España. Me acuerdo de estar allá llorando, sin un peso y pensando: '¿Qué hago acá?'", dice.

Deandrea fabrica otras variedades de galletitas y "picos" (a la izquierda) para la picada

La máquina salía 60.000 euros. Cuando llegó a la Argentina, recibió un llamado de su despachante de Aduana: tenía que pagar 40.000 euros de IVA. "En ese momento me explicó que, si no lo pagaba, el cargo se mantenía y se sumaban $10.000 más de depósito por mes. Me pelee con todos: presenté cartas a la AFIP para pedirles que me lo dividan en 12 pagos, y no hubo caso. Yo ya estaba sin un mango por la máquina, así que un amigo me hizo un préstamo, la saqué, y así arranqué a producir", relata.

Así es la máquina que importó de España para fabricar los "picos"; la pagó 60.000 euros, pero tuvo que añadir 40.000 euros de impuestos cuando la importó a la Argentina

El aprendizaje de su primer proyecto todavía sigue a flor de piel: decidió centralizar todo en él e intentó reducir la plantilla lo más posible: tiene solo cuatro empleados. Es él mismo quien representa a la compañía en ferias internacionales (recientemente estuvo en Alemania, en Anuga, la feria de alimentación más grande del mundo), él mismo hace las entregas a los supermercados y mayoristas y él mismo hace todos los trámites.
Además de los bizcochitos, las galletitas y los "picos" que ya produce, está armando una marca de arroz orgánico para exportar y vender en el mercado interno. En 2018 su empresa facturó $19 millones y hoy vende 7000 cajas de galletitas por mes (es decir, unos 170.000 paquetes). Pero todavía se lamenta por su primera pérdida. "En una pyme vos ponés todo de vos, hasta tu corazón. Al día de hoy no termino de recuperarme", admite.


lunes, octubre 28, 2019

Con el Nobel a los "randomistas", la grieta llegó al ámbito académico


Fuente: LA NACION

Parece el nombre de una tribu de magos de Harry Potter o de una logia secreta. La categoría de "randomistas", sin embargo, es la corriente de moda entre los economistas en los últimos días: así se bautizó de manera coloquial a los experimentalistas cuyo trabajo fue reconocido con el último Premio Nobel de Economía. Tanto Esther Duflo como Abhijit Banerjee y Michael Kremer son pioneros e impulsores del uso de las "pruebas controladas aleatorias" que revolucionaron las políticas contra la pobreza en las últimas dos décadas. En inglés "azar" es "random", y de ahí viene el nombre popularizado.

Hacía mucho que un Nobel en Economía (en rigor, "Premio en Ciencias Económicas en memoria de Alfred Nobel", dado que esta categoría no está en el legado original) no generaba un debate tan intenso, tanto en los elogios como en las críticas. A la lluvia de valoraciones positivas iniciales para una rama de la economía "que por fin logró avances comprobables y con evidencia" en la lucha contra la pobreza le siguió una tormenta igualmente intensa de comentarios negativos, por distintos motivos. El ascenso de los "randomistas" no pasó desapercibido y generó un debate con cruces inusuales para un ámbito académico.

Según los considerandos de la Academia Sueca, se premió principalmente el "enfoque experimental en el alivio de la pobreza". Se reconoció su contribución sobre el terreno a los avances de la economía de los países en vías de desarrollo, "con aplicaciones prácticas y no sólo con modelos teóricos". El trabajo empírico de los galardonados, basado en descomponer el problema genérico de la pobreza en desafíos más concretos a los que poder aplicar soluciones cuya efectividad pueda ser más fácilmente medible, sirvió hasta ahora para logros tan importantes como mejorar el nivel educativo o las tasas de vacunación en países muy pobres como Kenia o India.

Los elogios a esta decisión llegaron por distintos flancos. En una ciencia que tiene un problema grave de falta de diversidad, se premió por primera vez a una economista (la anterior galardonada, Elinor Ostrom, era politóloga). Duflo, con 46 años, es además la persona más joven que haya recibido este galardón. Mientras que el Nobel en Economía suele enfocarse en reconocimientos a la trayectoria (a veces por novedades teóricas que ya llevan décadas), esta vez se optó por iluminar un campo sumamente actual. Y mientras que a la ciencia de Adam Smith y Keynes a veces se la acusa de un exceso de abstracción, con modelos teóricos que solo relucen en las revistas especializadas pero no tienen nada que ver con la realidad, los "randomistas" llegaron cargados de pragmatismo y resultados concretos.

A todo esto se le suma un "sesgo de relato": los estudios y experimentos de los flamantes premios Nobel son más fáciles de contar y de entender para un público no especializado que otros campos más complejos de la economía y, por lo tanto, la cobertura mediática se amplificó. Mientras que premiados anteriores tenían vidas académicas más aburridas, los "randomistas" son, en algunos casos, una suerte de Indiana Jones de la economía, con experimentos legendarios que mejoraron la vida de millones de personas en los lugares más pobres del mundo. En un famoso discurso, Duflo dijo que aspiraba a que hubiera cada vez más "economistas como plomeros", que se dedicaran a solucionar problemas concretos, con métodos experimentales (los ensayos con control aleatorio o RCT por sus siglas en inglés) cuya validez viene de décadas de práctica en la medicina, la biología y otras ciencias más duras.

"Ojo con creer que con este emergente los economistas hemos descubierto el método científico: un modelo de ?equilibrio general' es tan método científico como un RCT, y un RCT malo es tan poco método científico como cualquier modelo malo. Que funcionen o no es otra discusión", explica el economista Walter Sosa Escudero, profesor de Udesa, uno de los primeros (años atrás) en celebrar la "revolución de credibilidad" que trajeron los experimentalistas, pero quien también cree que a veces esta tribu se pasa de rosca.

Algo similar opina Andrés López, de la UBA y director del IEEP: "El problema que veo es cuando en desarrollo o en cualquier otro campo de la economía solo vale hacer preguntas para las cuales tenés una respuesta que te permita publicar en un journal. Como los análisis a nivel país son dudosos econométricamente, y entender cómo cambiar un país es muy difícil, nos dedicamos a las micro-intervenciones". Sosa Escudero acota: "Como el chiste del borracho que busca las llaves donde ilumina un farol y no donde se perdieron".

En la última semana aparecieron artículos con críticas diversas al enfoque "randomista". Lant Pritchett, economista especializado en temas de desarrollo de Harvard, es uno de los principales escépticos. Marca, por ejemplo, debilidades metodológicas, como el "sesgo de la prueba piloto", por el cual un ensayo beta suele estar muy bien cuidado, pero luego su efecto se diluye cuando escala a una política pública masiva. Hay dardos éticos (hasta dónde es válido hacer experimentos con políticas de salud o educación en países pobres, y si no se trata de un nuevo colonialismo).

OpenDemocracy publicó un muy buen artículo de Ingrid Harvold Kvangraven que resume otras preocupaciones. La principal: que en un momento de crisis sistémica como la que atraviesa el planeta se celebren las "preguntas pequeñas". Algo funcional al statu quo del poder: pequeños pasos en lugar de cambios estructurales. Incentivos para que los maestros falten menos, en lugar de atacar el problema de los ajustes fiscales que recaen sobre la educación. "Mientras que estas microintervenciones pueden producir resultados positivos y aliviar síntomas, hacen poco por desafiar el sistema que produce esos problemas", sostiene la autora.

Para Juan Pablo Rud, economista argentino que da clases en Royal Holloway, Universidad de Londres, no tiene sentido "presentar como sustitutas estrategias que son complementarias". Y añade: "El Nobel a unos no niega la relevancia de otros. De hecho, hace pocos años se lo dieron a Angus Deaton, quien plantea muchas de estas críticas". Rud remarca que el Nobel de Economía premia avances en el conocimiento o en métodos para mejorarlo. "Siempre va a ser incompleto e imparcial, porque así avanza el conocimiento. A veces al Nobel se le piden cosas que no puede ser", dice.

De hecho, los galardonados suelen resaltar en sus estudios el carácter complementario (de otras líneas de economía del desarrollo) de su enfoque. Y las "micro-intervenciones" en algunos casos mejoraron la vida de millones de personas. Los RCT sirvieron para desmitificar algunas políticas (por ejemplo, la de los micro-créditos, muy de moda en la década pasada y cuya efectividad fue relativizada por los "randomistas") y poner en valor otras, como las acciones contra los parásitos en África.

El solapamiento con la agenda "nudge" de la economía del comportamiento también permitió modificar la visión sobre la pobreza: mientras que antes se suponía que había que corregir hábitos y conductas en las capas más vulnerables, ahora se sabe que una situación de extrema pobreza afecta cuestiones cognitivas y, por lo tanto, las acciones a coordinar son distintas.

Después de todo, para la crisis sistémica actual del planeta no alcanza ni la economía de "grandes preguntas", ni la de "pequeñas" ni la de "medianas". Simplemente no alcanza con ninguna disciplina tomada en solitario.


domingo, octubre 27, 2019

Cinco tipos de tribus de oficina en el entorno laboral actual

Regus cumple 30 años desde su fundación en 1989, periodo durante el cual el trabajo flexible y fórmulas colaborativas en auge como el coworking se han convertido en una realidad para todo tipo de empresas y perfiles profesionales.

Precisamente, a través de esta trayectoria y evolución en la forma de organización empresarial, Regus ha identificado las nuevas 'tribus' de trabajadores, fruto de estos cambios y su adaptación a las actuales fórmulas de trabajo lejos de la oficina tradicional.

Los empleados con un horario regular fijo

Las personas que se identifican con este grupo son aquellos empleados fijos que, tanto a la entrada como a la salida, fichan siempre a la misma hora. A día de hoy, esta tribu sigue predominando en España con una jornada laboral general de 8 horas diarias que se extiende a las 10 o 12 horas si sumamos los descansos y desplazamientos. Un estudio de IMF Business School indica que España se sitúa entre los países europeos en los que más se trabaja con una media de 1.691 horas al año.

A este dato se le suma que el 65% de los españoles admite trabajar fuera del horario laboral – un 90% en caso de los directivos – según un informe elaborado por las compañías Edenred e Ipsos. Esta realidad laboral pone de manifiesto la necesidad de implantar nuevas formas de trabajo y de mejorar la flexibilidad laboral, una transformación que ayudaría no solo a conciliar mejor con la vida familiar sino ayudar a las empresas a mejorar su productividad hasta en un 20% según la última encuesta anual Global Workspace de IWG.

Side hustlers, asalariados con trabajos adicionales

En los últimos años esta tribu ha emergido con fuerza. Estas personas cuentan, además de un empleo remunerado, con otro proyecto o actividad paralela remunerada. La pertenencia a este grupo puede ser por motivos muy diversos: obtener ingresos adicionales, desarrollar y perfeccionar nuevas habilidades o crear un negocio propio en el futuro. Esta tendencia se debe principalmente al aumento de la incertidumbre laboral y la dificultad para encontrar un trabajo. No obstante, esta realidad ha fomentado el espíritu de innovación y emprendimiento.

Pluriempleados proactivos

Esta tribu es tradicionalmente conocida por integrar a los freelance, autónomos o trabajadores polifacéticos con distintos proyectos laborales. Según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) la opción de trabajar por cuenta propia en distintos proyectos va en aumento, con 448.200 pluriempleados que aseguran combinar dos o más trabajos al mes.

Nómadas digitales

Los nómadas digitales son personas que han sacado el máximo provecho a Internet y a las nuevas tecnologías. Estos avances han revolucionado estilos de vida y formas de trabajar. Muchas personas aspiran a incorporarse a esta tribu ya que este estilo de trabajo ofrece más autonomía personal, oportunidades de viajar y un atractivo equilibrio entre vida personal y laboral.

Trabajadores flexibles

Desde trabajos remotos hasta las ocupaciones por determinadas horas, este concepto de trabajo flexible está cada vez más demandado, frente al horario laboral y la ubicación fijos tradicionales. Estas personas son empleados cuyas empresas mantienen una relación diferente. A diferencia del resto, la capacidad de organización es parte de su responsabilidad bajo el criterio de eficiencia laboral. En este contexto, las nuevas tecnologías y los espacios de trabajos flexibles son un atractivo para esta tribu que busca centrarse únicamente en su objetivo de negocio y a la vez, interactuar con un entorno profesional y establecer sinergias con otras personas.

Tal y como asegura Philippe Jiménez, country manager de Regus para España, "hemos visto grandes cambios en los últimos 30 años en nuestra red de espacios de trabajo flexibles, y con la irrupción de factores como la Inteligencia Artificial y la robotización, así como la movilidad sostenible o el relevo generacional de los empleados, esperamos que el espacio de oficinas y el trabajo evolucionen aún más en las próximas tres décadas".

La inauguración del primer espacio flexible de Regus coincidió con la celebración de grandes hitos como la creación de la Wold Wide Web, la caída del Muro de Berlín o el lanzamiento de los primeros satélites GPS. Durante estas tres décadas se han vivido numerosos cambios sociales, políticos y económicos a los cuales se han adaptado, entre otros muchos aspectos de nuestro día a día, nuestra forma de trabajar. El crecimiento de los espacios de trabajo flexibles y coworking son un testimonio claro de la transformación de la forma en que trabajan las personas en 2019 y en el futuro.


sábado, octubre 26, 2019

Emprendedores sénior, todavía hay futuro a los 60


Según el estudio “Un país con ganas” de Aquarius y Metroscopia, el 66% de los españoles asegura que la edad ha despertado en ellos la ilusión por emprender nuevos proyectos. Si bien es cierto que el estudio marca como principales barreras la escasez de ayudas económicas, la falta de tiempo, la falta de apoyo y reconocimiento e, incluso, las críticas al emprendedor mayor, se concluye que nuestros mayores tienen muchas ganas de aportar a la sociedad, de seguir aprendiendo y de experimentar cosas nuevas.

Doro, compañía tecnológica experta en el sector senior, advierte una tendencia muy positiva en la sociedad de la mano de acciones que dan visibilidad al talento senior y normalizan el emprendimiento independientemente de la edad con la que se lleve a cabo.

  • Recientemente se ha estrenado la película “Abuelos”, dirigida por Santiago Requejo, un largometraje que aborda el tema de la exclusión laboral que han sufrido los mayores en los últimos años y que propone un nuevo paradigma, con nuevos valores más allá del ritmo de trabajo frenético y del éxito inmediato, y un nuevo lenguaje inclusivo, que no deje fuera los valores que los mayores tienen que aportar, como son la experiencia, la estabilidad, la prudencia en la toma de decisiones o la inteligencia emocional.
  • En los últimos meses hemos visto en España buenos ejemplos de emprendimiento. Basta ver los proyectos premiados y finalistas del concurso Imparables de Aquarius, en el que hay una gran variedad de proyectos creativos e innovadores. Uno de ellos es “3D Impact”, un servicio de reciclaje y recirculación de residuos ideado por Jose Manuel de Ben. Este sevillano de 68 años fue ganador del concurso “Creando Puentes”, una iniciativa impulsada por Rosa María Sadoril, burgalesa de 62 años para incentivar la inserción sociolaboral de jóvenes en riesgo de exclusión.
  • Además, en general, los medios de comunicación y las redes sociales han favorecido la difusión de historias de emprendimiento de adultos mayores que en otros tiempos no eran consideradas tan atractivas como para ponerlas en valor. Así, por ejemplo, conocemos hoy que Harland Sanders David fundó con 65 años la exitosa cadena KFC, precisamente con el dinero que le quedaba tras su último fracaso, o que William Perim a los 61 años decidió no jubilarse e iniciar su propio negocio en propiedad creando la franquicia Batteries Plus Bulbs, situada en San Rafael, California.

Esto solo demuestra que, si se tiene una gran idea y la ilusión y las ganas de llevarla a cabo, no hay por qué ver impedimentos sino posibilidades en el mundo empresarial. ¡Adelante, seniors, el mundo es vuestro!


viernes, octubre 25, 2019

¿Sirven de algo las técnicas de 'mindfulness'?


Dreamstime

Lo que funciona para unos no tiene por qué funcionar para otros, pero las compañías usan estas técnicas para reducir el estrés y aumentar la productividad.

Mantenga la atención en el presente. Libere su mente de preocupaciones", me indican mientras me desplazo torpemente por la sala de un estudio de baile del centro de Londres. Mis compañeros de clase están tan concentrados en el momento, que algunos parecen completamente absortos. Me encuentro en una clase de Biodanza. La experiencia forma parte del reto que me he marcado para intentar aprender algo sobre mindfulness, un proceso mental que nos ayuda a sentir nuestro cuerpo y mantenernos en el presente.

Se dice que, si llevamos la atención al momento, -nuestros pensamientos y sensaciones- los niveles de estrés y ansiedad se reducen. Durante un periodo de dos semanas pruebo varias técnicas y ejercicios de meditación para ver qué sensación me causan. Sue James, la instructora de Biodanza, explica que esta variedad nos hace "tener más conciencia de nosotros y de nuestra relación con los demás". Se nos invita a formar un círculo, a cogernos de la mano y a mirarnos fijamente a los ojos. Hay un momento en el que me olvido de lo ridículo que debo parecer y logro concentrarme en la danza. Según James, "con la práctica, la concentración se prolonga y empezamos a notar los beneficios".

Algunos alumnos me explican cómo la técnica les ha ayudado a dormir mejor y a mejorar sus relaciones con los demás. Aunque esta técnica se imparte fuera de la oficina, hay clases de mindfulness corporativo destinadas a reducir el estrés y aumentar la productividad que ya ofrecen empresas como GlaxoSmithKline o el diario Financial Times. Mi compañera Claire Barron dirige las clases de yoga y meditación. En estas últimas nos enseña técnicas de respiración. Barron también da clases de meditación gong y decido asistir a una. Me tumbo en una esterilla con los ojos tapados. Intento concentrarme en la respiración, pero mi mente no para hasta que escucho el hipnótico sonido del gong y al final consigo relajarme. "Algunas personas se sienten incómodas en este estado", explica Barron. De todas las técnicas que pruebo, esta es la que más me ayuda a estar en el presente.

En algunas meditaciones, ni siquiera hay que apagar el móvil. Headspace, una de las muchas apps, ofrece meditación guiada a 54 millones de usuarios de 190 países. Meditar con un dispositivo que es fuente de distracciones parece contradictorio, pero en Headspace nos aclaran las dudas: "Publicamos un estudio según el cual, utilizar Headspace, aunque sea poco tiempo, reduce el uso compulsivo de Internet". Por 12,99 dólares al mes, una suave voz nos guía a través de una serie de meditaciones destinadas a reducir la ansiedad o a mejorar nuestra productividad. Pruebo la app durante dos semanas y me doy cuenta de que lo más difícil es encontrar el momento para usarla. Lo más frustrante es que, cuando aumento el tiempo de meditación, mi mente se distrae pensando en todo lo que debería estar haciendo.

Lo que sí he notado es que mis problemas para conciliar el sueño mejoran después de usar Headspace.

Algunos detractores de estas técnicas creen que la meditación se está utilizando con fines comerciales en personas con problemas psicológicos.

En su libro McMindfulness, Ronald Purser reconoce que la meditación en algunos casos puede tener efectos negativos, como miedo, pánico y ansiedad. A Purser le preocupa que nadie se pregunte por qué hay tanto estrés en el trabajo.

Después de probar distintos programas en estas dos semanas, llego a la conclusión de que el mindfulness no es una ciencia exacta: lo que funciona para una persona no tiene por qué funcionar para el resto, y encontrar un momento para practicar con una agenda apretada no es fácil: el mindfulness puede ser complicado.



miércoles, octubre 23, 2019

La emergencia no declarada que hace del país un eterno emergente

La necesidad de un plan de largo plazo, 
vencida por las urgencias de la política

La Argentina no experimenta una alta tasa de crecimiento económico como para ser considerada una " economía emergente". Por el contrario, no crece desde 2011, su nivel de valor agregado en la economía viene en picada, hay alta inflación, alto nivel de deuda de corto plazo, y un panorama no esclarecido de si vamos hacia el logro del superávit fiscal para que los ingresos superen a los gastos o si vamos hacia una emisión monetaria con mix de más impuestos y sin posibilidad de acceder a los mercados voluntarios de deuda. La última opción la probamos 93 años de los últimos 100. La primera, solo 7 años y siempre fue exitosa.

Nuestro país no crece ni se desarrolla. La necesidad de un plan económico de largo plazo es vencida por la necesidad política de corto. No hay dogma ni programa que sea exitoso. Heterodoxia y ortodoxia vencidas por la política. Según el Banco Mundial la Argentina es el país que atravesó más recesiones entre 1961 y 2018: hubo 22 episodios. Le siguen la República Democrática del Congo con 20 recesiones; Zambia, Haití, Chad y Burundi, con 17 en cada caso, y Guayana, con 16. La receta del fracaso argentino es la siguiente: crecimiento de corto plazo y bienestar, para luego atravesar caídas profundas con rebotes pequeños de corto plazo. Cada caída antes del rebote duele más. Y se fue perdiendo altura porque ya no hacemos pico, sino que caemos cada vez en zona más cercana al valle. Distribuir riqueza sin crearla es distribuir cada vez más pobreza.

"Emergencia alimentaria", "emergencia pyme", "emergencia automotriz", entre otras. ¿Cuál es la madre del borrego? La "emergencia política" nunca declarada y nunca reconocida. Los argentinos no votan una "plataforma política" o un "programa económico". Cuando votaron en 2011 por Cristina Kirchner, quien obtuvo la presidencia por más de 54% de los votos, escucharon en la previa "sintonía fina" y la necesidad de recomponer tarifas de servicios públicos. El amor por los votos fue más fuerte que transparentar la realidad de una promesa de campaña. En 2017 Macri ganó las elecciones legislativas con 41% de los votos a nivel nacional y se enamoró del "gradualismo", hasta que el mercado le dio un baño de realidad y le informó, a los 6 meses, que el déficit no se puede financiar solo con deuda. Y terminó en un fuerte ajuste.

El Estado hizo un mayor nivel de transferencias sociales en forma sostenida en los últimos dos períodos presidenciales, mediante una presión tributaria brutal sobre el generador de la riqueza y único actor económico que podría generar las condiciones para ir reemplazando plan social por trabajo: el sector privado empresario. No las grandes empresas sino las micro, pequeñas y medianas empresas son las que pueden generan empleo en volumen. Supongamos que soy empresario y hago 10.000 unidades de X producto. El Estado vía impuestos se queda con 5000 unidades y de esas 5000, a valor nominal en pesos el 70% de su presupuesto lo destina a gasto social, incluyendo además de planes sociales a las jubilaciones.

Las pymes tienen una dependencia del mercado interno. Las ventas minoristas de acuerdo a los datos de la CAME cayeron 14,5% en septiembre y 12,8% en el acumulado del año. La industria, según el Indec, usa el 60,5% de la capacidad instalada (la rama automotriz usó en agosto 43,5% en agosto).

Tres factores que llevan a la emergencia son: 1) menos ventas y más facturación por inflación = más impuestos con caída de márgenes de ganancia; 2) la presión tributaria, gran problema para emprendedores y microempresarios; 3) tasas de interés imposibles, con alargamiento o quiebre de la cadena de pagos y ahogo financiero. En conclusión: la "emergencia política" no declarada ni reconocida hace de la Argentina un eterno país "emergente".

Damián Di Pace, es analista económico y director de Focus Market

martes, octubre 22, 2019

Los riesgos de las empresas en su viaje digital

DREAMSTIME EXPANSION

Una reciente encuesta de Deloitte a 166 organizaciones de todo el mundo, entre ellas españolas, desvela cuáles son los principales obstáculos que dilatan el tiempo que tardan las compañías en convertir las ideas en iniciativas.

La transformación digital no está exenta de riesgos. Las empresas se enfrentan al reto de ser ágiles en su digitalización, pero reconocen que encaran dificultades para llevar a cabo estos planes. Una reciente encuesta de Deloitte a 166 organizaciones de todo el mundo, entre ellas españolas, desvela cuáles son los principales obstáculos que dilatan el tiempo que tardan las compañías en convertir las ideas en iniciativas.

Según el informe Global Digital Risk Survey 2019, siete de cada diez empresas reconocen que encuentran con obstáculos a la hora de llevar las ideas al mercado con agilidad. Un 65% de las empresas encuestadas señala barreras de tipo cultural, un 58% menciona que los procesos y las metodologías heredadas frenan su avance, mientras que un 56% asegura que la falta de talento es un impedimento.

"Uno de los retos a los que se enfrentan las compañías para una rápida adopción de la transformación digital es la falta de equipos humanos cualificados. A ello se suma que, cada vez más, son necesarios perfiles que aúnen el conocimiento de las nuevas tecnologías con el entendimiento de cómo hacer evolucionar el negocio. Todo ello supone un desafío", destaca Manel Carpio, socio de Risk Advisory de Deloitte.

Muchas de estas barreras dificultan a las empresas adoptar las nuevas tecnologías más allá de las pruebas piloto. Un 20% de los encuestados reconoce haberse topado con dificultades para articular y poner en práctica el modelo de negocio. La falta de madurez de las capacidades y del modelo de gobierno de las compañías, la escasez de talento, la oposición cultural o las dificultades presupuestarias enlentecen la digitalización.

El informe concluye, además, que la transformación digital ha generado nuevos riesgos digitales, como la privacidad, que se ve impactada por tecnologías como el big data, la inteligencia artificial o el Internet de las Cosas (IoT). Carpio menciona también el sesgo que introducen los algoritmos de inteligencia artificial y los riesgos de ciberseguridad en dispositivos IoT.

Desde un punto de vista tecnológico, la nube (85%), las metodologías ágiles de desarrollo (80%) y las interfaces de programación (77%) lideran los niveles de adopción. Menos de un 10% de los encuestados ha logrado escalar tecnologías como el Internet de las Cosas, la robótica, el aprendizaje automático, el blockchain o el procesamiento del lenguaje natural.


lunes, octubre 21, 2019

De la criptoamnesia al efecto Ikea: rarezas que estudia la economía del comportamiento

Crédito: Shutterstock

Cuando a Daniel Kahneman, el padre de la economía del comportamiento, le preguntaron en un reportaje qué sesgo (error sistemático) eliminaría de la conducta humana si pudiera, señaló sin dudar al "exceso de autoconfianza". Para el psicólogo y Nobel de Economía, es el responsable de que líderes históricos con ego grande (Napoleón, Hitler, entre otros) se hayan aventurado a guerras alocadas que le costaron la vida a millones de personas.

El exceso de autoconfianza, responsable de que el 90% de los humanos estemos convencidos de que manejamos el auto mejor que el promedio de la población, o de que el 95% demos por sentado que tenemos mejor sentido del humor que el promedio, es el sesgo más estudiado de la economía del comportamiento. Le pisa los talones, en segundo lugar, la "aversión a la pérdida", por la cual las derrotas o fracasos nos duelen en mayor proporción de lo que disfrutamos un resultado exitoso.

Para Carlos Scartascini, economista argentino y líder del grupo de Economía del Comportamiento del BID, en muchas situaciones de decisiones complejas (a quién votar, dónde invertir) seguimos suponiendo que las personas actúan racionalmente cuando está claro que no. "Aun cuando compran un té o café caliente hay que darles una taza con el mensaje de 'cuidado que está caliente', a pesar de que quemarse tiene un costo alto e inmediato", ejemplifica. En su especial humorístico "Human", el cómico británico Ricky Gervais formuló un argumento parecido: cuestionó la racionalidad de la inteligencia colectiva que llevó a Inglaterra al Brexit -la separación con la Unión Europea- cuando "los envases de detergente deben tener un cartel gigante que dice '¡Peligro! No tomar'".

El exceso de autoconfianza y la aversión a la pérdida son los sesgos más famosos y estudiados, pero hay ya más de 200 etiquetados.

Surgen nuevos todos los meses, como especies de animales desconocidas, y por lo general suscriben a alguna de las grandes familias de errores sistemáticos. Lo que sigue es un listado de algunos de los más extraños y recientes sesgos.

Sesgo de "comienzo fresco" (en inglés "fresh start bias"). Somos más capaces de cambiar de hábitos (hacer una dieta, dejar de fumar, etcétera) cuando nos lo proponemos a partir de una fecha relevante: 1° de enero, un cumpleaños, etcétera, según explica Scartascini.

Criptoamnesia. Especie muy avistada en redes sociales; se da cuando alguien cree que una idea, frase o broma se le ocurrió a él o a ella y no, como pasó en realidad, a otra persona. Es un sesgo de falsa memoria y autoengaño que fue identificado por primera vez en las ciencias cognitivas en 1874.

¿Con qué brazo se sostiene a un bebé? El economista de la UNLP Martín Tetaz, que escribió libros sobre economía del comportamiento presta atención a qué brazo usan sus hijos (tiene tres) para mecer un muñeco. Aclaración: esto no está definido por el hecho de ser diestro o zurdo. Usar el lado izquierdo implica que la información que llega del acunado se procesa con el lado derecho del cerebro, responsable de interpretar señales emocionales y de lenguaje. Según estudios recientes, hay una altísima correlación entre usar el brazo izquierdo y poseer mayores habilidades sociales (mayor probabilidad de seguir reglas o de compartir con los compañeros, o necesidad de agradar a la maestra o maestro). El sesgo es válido tanto para niños como para adultos.

Sesgo de negatividad. Es un error de la familia de aversión a la pérdida, y señala que las noticias negativas se procesan y recuerdan con mayor intensidad que las positivas. Una vuelta de tuerca que advierte Tetaz: el sesgo se revierte con la edad; las personas mayores tienden a valorar más positivamente experiencias, personas, espectáculos, etcétera.

Efecto ostra. Viene del (falso) concepto de que las ostras entierran su cabeza en la arena cuando detectan peligro. En este caso, en épocas de turbulencias y malas noticias, los inversores y ahorristas prefieren "no ver ni escuchar" y, por lo tanto, cuentan con peor información para la toma de decisiones. Cualquier similitud con la coyuntura actual es pura casualidad.

Dr. Jeckyll y Mr. Hyde. Las economía y las ciencias sociales en general consideran que las personas toman decisiones consistentes en el tiempo, y la realidad es que todos somos "alguien distinto" -a nivel de toma de decisiones- en diferentes momentos y contextos, según explicó recientemente, en una conferencia en el Instituto Baikal, la economista especializada en comportamiento Florencia López Boo, también del BID. El que estudió este sesgo a fondo es Daniel Ariely, con un experimento muy divertido en el que personas excitadas a nivel sexual tienden a dar respuestas muy distintas en procesos decisorios que aquellas que no lo están.

Efecto Ikea. ¿Le costó, por la densidad del tema, terminar de leer el Álter Eco de hace dos semanas, sobre computación cuántica, o el de Walter Sosa Escudero de la semana pasada sobre big data? Es probable que si hizo el esfuerzo de concluirlos tenga una tendencia a valorarlos: a menudo, las películas difíciles de digerir, los libros difíciles de leer (esos mamotretos técnicos de más de 1000 páginas) o las clases complicadas de entender son más apreciadas, justamente, para justificar el esfuerzo en el que se incurrió. Es en parte un autoengaño de ego: si destinamos muchas horas a leer el último libro de Piketty, de 1200 páginas llenas de cuadros, mejor que nos guste y no reconocer que perdimos tiempo. Desde el programa de derecho, Economía y Comportamiento de la UNS, en Bahía Blanca, lo relacionan con el "efecto Ikea", por la cadena sueca que vende muebles para armar. Por más que no queden del todo bien, los muebles son más valorados por quienes hicieron el esfuerzo de armarlos. Es una de las claves del éxito de este formato de negocio.

El efecto Benjamin Franklin. Es un fenómeno psicológico por el cual una persona que le hizo un favor a otra tiene más chances de hacerle un nuevo favor que si recibió uno de la otra parte. Se trata de una disonancia cognitiva: el cerebro tiende a concluir que nos gusta la otra persona porque le hicimos un favor (para evitar una disonancia se "reescribe" nuestra percepción inicial). Lo utilizó Franklin a fines del siglo XVIII para ganarse el favor de un opositor político, y de ahí deriva su nombre.

El efecto porrista. Tendemos a dar una mayor valoración estética a la gente cuando la vemos en una foto grupal que en una individual. Es un sesgo descubierto hace poco tiempo, en 2013.

Viento de frente y a favor. El favorito de Nassim Taleb, el autor de El Cisne Negro: tendemos a percibir de manera muy asimétrica el rol del azar y del contexto. Cuando nos va mal, fue culpa del viento en contra; cuando nos va bien, el mérito es nuestro.

El poder de las frases en rima. Uno de los sesgos cognitivos más raros consiste en que tendemos, de manera muy consistente, a percibir como más verdaderas aquellas frases que involucran una rima. Es una ventaja a la que suelen apelar abogados en juicios de Estados Unidos de alta trascendencia mediática (como el de O. J. Simpson) para que el jurado apoye a una determinada postura.

¿Parecen conductas demasiado extrañas o tiradas de los pelos? Era la idea, justamente: existe un "efecto de lo bizarro" por el cual los contenidos de esta categoría son más recordados que el resto. Al igual que Google, Amazon, Facebook y que las unidades estatales de "Nudge" de más de 30 países, esta columna aprovecha enseñanzas de la economía del comportamiento para sumar compromiso y recordación entre sus consumidores.


domingo, octubre 20, 2019

Esto es lo que se sabe de usted y que no cuenta su currículo


DREAMSTIME / EXPANSION

La información que recoge su currículo difiere de su huella digital. Este rastro online que a veces ignora puede ser decisivo para acceder a un empleo.

Ana Zayas es associate director de PageGroup. Por los ojos de los profesionales que trabajan en esta firma de recursos humanos pasan miles de currículos de personas que quieren acceder a un empleo o dar un giro a su carrera. Sin embargo, esto no es lo único que procesan cuando tienen que medir el atractivo laboral de esas personas. Zayas asegura que cuando localizan a un candidato del que quieren tener más información, "además de la que viene en su currículo, primero acudimos a nuestra base de datos para analizar el histórico que tiene con nosotros, ofertas, motivaciones, etcétera, y a LinkedIn".

Esta red profesional se ha convertido en uno de los canales habituales para completar el proceso de identificación de candidatos... y no es el único. Internet proporciona información muy valiosa para conocer más la vida personal y profesional de un candidato. Y, si no, haga la prueba. Todo tipo de actividad, por pequeña que sea, queda reflejada en el espectro virtual, incluso aquella que desea que pase inadvertida. "Nosotros no juzgamos los contenidos en ninguna de las plataformas, pero sí nos ayuda a crearnos un perfil profesional de ese candidato", reconoce Zayas.

Al descubierto

Antonio Núñez, senior partner de la firma de cazatalentos Parangon Partners, explica que en sus búsquedas directas -contactan con el candidato que encaja en el perfil que demanda su cliente- recurren a sus fuentes más que a las redes sociales, pero señala que consultan los artículos que han podido escribir o las referencias que hacen otros de ello: "Más que la cantidad de seguidores o publicaciones comprobamos la calidad ambos. Por ejemplo, entendemos que un profesional de alto nivel puede no tener capacidad de generar contenidos propios, pero podemos comprobar la calidad de sus conexiones".

La mayoría de los cazatalentos suele priorizar la información que procede de sus bases de datos de candidatos, "que contiene información objetiva: cuándo le hemos contactado, cómo respondió, si fue entrevistado/a, comentarios a esa entrevista, si fue presentado, resultado, comentarios del cliente", apunta Luis Truchado, socio de Eurogalenus. Revela que en ocasiones consulta LinkedIn, que es más profesional, pero cuenta que si se detecta que el candidato lo utiliza para asuntos personales "genera rechazo". Andrés Fontenla, socio director de Fontenla &Recarte executive search, explica que sobre todo valora la entrevista personal, "en la que además de analizar los aspectos más específicos de la experiencia, se trabaja la confianza y la credibilidad". En segundo lugar obtienen las referencias de antiguos jefes y compañeros, a lo que suman la información obtenida en los medios de comunicación. En último lugar, consultan lo que circula en las redes.

Parece evidente que lo que nos dejamos ver en los social media tiene un impacto. Belén Arcones, directora general de IMFBusiness School, subraya que "la mayoría de los reclutadores, un 94% según datos de Mediabristo, busca información sobre los posibles candidatos en LinkedIn". Añade que "dos de cada tres compañías aseguran buscar información sobre futuros empleados también en Facebook; y un 52% además revisa en los perfiles de Twitter". A lo que suma Instagram.

Para que la información que aparece en esos canales no se vuelva en contra, Arcones recomienda poner atención a los datos que compartimos en Internet, "lo que no significa que nuestras redes sean cien por cien contenido exclusivo de nuestra área profesional. Podemos postear hobbies o fotografías de nuestros viajes, pero debemos saber cómo, dónde y cuándo hacerlo. Por ejemplo, LinkedIn no es el mejor lugar para subir fotografías personales; así como poner atención a ciertas expresiones, opiniones y palabras malsonantes que podamos publicar/retuitear en Twitter". Otro de los aspectos que destaca son las interpretaciones de las publicaciones en cualquier portal digital: "La coherencia es muy importante, por ejemplo, alguien se puede definir en una entrevista como alguien experto en redes, pero sus perfiles están totalmente descuidados o no tiene".

No obstante, Manuel Clavel, socio de Talengo, afirma que tener una huella digital fuerte no es negativo: "si tiene cierta coherencia es un buen indicador. No sería una buena huella aquella con tintas hedonistas, una sobre exposición no es muy valorada, ni tampoco quienes aprovechan Twitter para vertir sus opiniones personales".

Mentiras arriesgadas

Si hay algo que el ámbito digital deja al descubierto son los posibles traspiés en una carrera de éxito. Se controla lo que se dice, pero no lo que los demás dicen de nosotros. Ya sea en la vida real como en la virtual, un error mal gestionado puede ser nefasto en un cambio de rumbo profesional. Según Fontenla, "es recomendable que el candidato trate siempre de forma directa cualquier tropiezo profesional o situación comprometida que haya experimentado, ya que es la única forma de construir un argumento constructivo ante cualquier duda que el interlocutor pueda tener. Ocultarlo puede restar su credibilidad y conseguir que no sea tenido en cuenta". Zayas explica que "en caso de descubrir discrepancias en algún aspecto de la trayectoria profesional entre lo que nos ha contado y nuestra información lo comentamos con él, por teléfono u organizando una nueva reunión para tener toda la información y puntos de vista".

Revisar la huella digital antes de una entrevista es la mejor cautela, "tan solo hay que buscar nuestro nombre en Google y revisar los resultados", subraya Arcones. "Aquello que consideremos que no aporta información relevante para el proceso de selección o que incluso puede ser contraproducente, deberíamos eliminarlo".

Nuñez cree que haberse equivocado en algún momento de la carrera profesional no tiene por qué ser un demérito: "En la entrevista preguntamos sobre el área en la que el candidato se considera menos bueno. Ya sea por falta de conocimiento propio o humildad, muy pocas personas responden. En caso de un fracaso profesional recomiendo que el profesional actúe con naturalidad, es mejor que saberlo por otros medios. Si el candidato lo reconoce demuestra humildad y, si ha aprendido de ello, es una persona válida". No obstante, Clavel señala que cuando se detecta que de forma deliberada se omite información, se genera una brecha de confianza importante: "En estos casos tratamos de confrontarlo con el candidato y, en función del resultado vamos avanzando en el proceso".

Cuánto dura la búsqueda

El tiempo que emplean los intermediarios laborales -ponen en contacto a candidatos que buscan empleo con empresas que demandan profesionales- en la identificación de un candidato oscila entre los quince minutos previos a la entrevista de los consultores de selección y los dos o tres días que dedican los cazatalentos que hacen búsqueda directa. En ambos casos depende del perfil, del puesto, de la empresa que demanda el candidato, las fechas y la ubicación. En el caso de directivos de primer nivel, el proceso de selección puede prolongarse por la búsqueda de referencias y contraste de información. En todos los casos, revisar la huella digital supone un tiempo añadido.


sábado, octubre 19, 2019

El liderazgo que beneficia a tu equipo

La creación de un impacto positivo y duradero en tu equipo no provendrá de recompensas aleatorias aquí y allá o por actividades trimestrales de formación de equipos. Los empleados inteligentes ya no se inspiran en el totemismo (inclusión simbólica). Buscan un sentido más profundo de cumplimiento y alineación en su trabajo, pero sobre todo en su líder.

Éste artículo de Entrepeneur explica las claves para ejercer un buen liderazgo. Hay cuatro hábitos diarios que tendrán un impacto tan positivo en tu equipo que funcionará como una máquina bien engrasada, incluso sin ti.

Reconoce a tu equipo al comienzo del día y dile que estás ahí para apoyarlos

Las recompensas y los reconocimientos se dan después de un trabajo bien hecho. ¿Qué pasa si inviertes el orden, si inspiras e invitas a tu gente a aprovechar al máximo su día para disfrutarlo antes de que se desarrolle?

Cuando estabas aprendiendo a andar en bicicleta, no importó lo que sucedió la primera vez que retiraste las ruedas de entrenamiento. Mamá o papá estaban allí para tranquilizarte, alentarte, animarte. Te montaste en su confianza para entrar en lo desconocido, dar lo mejor de ti y ponerte a prueba. Tenías apoyo incluso antes de empezar.

Los miembros de tu equipo probablemente no sean niños. Sin embargo, piensa en esto: ¿les das un grado de amor incondicional y profesional? Recibirlo creó niños sanos; complementó nuestro feroz sentido de la aventura para poner a prueba nuestros límites. Como adultos, este enfoque todavía tiene un impacto increíble en nosotros. Contrario a proporcionar asistencia de forma correctiva cuando algo sale mal, ¿podrías inspirarlos a franquear la puerta con más confianza al comienzo del día?

Si sabes que tus empleados tienen mucho en su plato, pídeles que analicen sus fortalezas y la capacidad que pueden alcanzar sus habilidades. Ayúdales a reconocer que tienen algunos desafíos difíciles por delante. Recuérdales el apoyo que tienen disponible y entrega esos recursos. Podría ser un simple registro para ver cómo transitan a lo largo del día, o comprarles el almuerzo porque sabes que el tiempo es extremadamente limitado para ellos. Demuestra servidumbre en apoyo de tu gente.

Hazte presente y da la batalla codo a codo con ellos

Aquellos líderes y gerentes que son los mejores para resolver los problemas de su equipo y lograr un alto rendimiento conocen a su gente. Pueden y saben cómo empatizar fuertemente con sus experiencias de equipo. Aprecian cómo se siente el rechazo de sus vendedores. Defienden a sus empleados que son despreciados y acosados ​​por clientes y consumidores.

Cuando estés preparado para declarar de manera transparente tus valores y ética, para defender a tu gente y a sus principios, no para pavimentar tu propia agenda y tu propia justicia, los miembros de tu equipo recordarán cómo los hiciste sentir. En el futuro, cuando les pidas que participen en un desafío particularmente agotador, estarán dispuestos a luchar también por ti. Algunas de las limitaciones de las jerarquías organizacionales se desmoronan para mejorar al equipo, y tu equipo tiene oportunidades para mostrar verdaderamente de qué está hecho.

Si estás pasando por la recepción y puedes ver que tu recepcionista está ocupada atendiendo a otro cliente, ¿podrías contestar el teléfono? ¿Estarías dispuesto a recoger y entregar parte del correo y entregarlo camino a tu oficina, incluso si eres un alto ejecutivo? ¿Qué te parece traer un café para tu asistente ejecutivo al regresar de una reunión de almuerzo, en lugar de darle cinco minutos adicionales para salir y tomar uno?
¿Qué pequeña actividad podrías realizar cada día que haga sentir a los miembros de tu equipo y darse cuenta de que estás en contacto con ellos y lo que hacen?

Habla de lo que crees, no sólo de cifras y números

Cuando las conversaciones cosquillean tanto la mente como el corazón, se crean mayores vínculos entre los miembros de una comunidad. Sin compartir tus secretos más oscuros o derramar lágrimas, sé sabio y considera compartir lo que te frustra, te enoja y te entristece tanto como lo que te agrada. Pero ¡Ojo! No te limites a compartir tus ideas. Pide y escucha las de tu equipo.

Sé prudente acerca de qué tan transparente eres y cuándo. Sin embargo, cuando la gente ve y puede sentir que eres humano y los aceptas como humanos, se relajan y se sienten menos preocupados por ser ellos mismos en su trabajo. Se sienten más libres para rendir al máximo.

Anima y crea oportunidades para que tu gente crezca, aprenda y mejore por sí misma

Carol Dweck, psicóloga social de la Universidad de Stanford, lleva mucho tiempo investigando y compartiendo resultados que ilustran el impacto positivo que nutre una mentalidad de crecimiento en la confianza, el rendimiento, la creatividad y la productividad.

Las inversiones en oportunidades de aprendizaje y capacitación que no se ajustan adecuadamente, que no están bien planificadas ni bien programadas pueden ser una pérdida de tiempo y dinero. Asignar personas a la capacitación cuando su motivación y su deseo de mejorar no están presentes, es imprudente. Puedes llevar un caballo al agua, pero no puedes hacer que beba.

No toda tu gente está motivada para aprender. No todos desean mejorar sus activos intelectuales y habilidades técnicas. Algunas personas simplemente no tienen metas en el lugar de trabajo, por no hablar de metas en absoluto. Está bien. Sugiere que terminen cada día revisando tres cosas que saben hoy que no sabían ayer. Pídeles que piensen de esta manera, y comenzarán a disfrutar de esta forma de pensar ampliada.

Imagina regalarle un paquete de clases a un empleado que quiera aprender a bailar salsa. Realiza una actividad en la que está personalmente interesado y que mejora su bienestar físico, mental y emocional. Él/ella es más feliz en el trabajo y se está desempeñando mejor. Esa experiencia está conectada contigo y el lugar de trabajo. Imagínate lo apreciado, personalmente reconocido y valorado que se sentiría ese empleado.

Si bien la práctica real de los empleados de Google que dedican el 20% de su tiempo a proyectos personales está en duda sobre si esto realmente sucede, su exjefe de recursos humanos, Laszlo Bock, explica que hacerlo o no, en realidad no es importante.

El permiso se otorga con el objetivo de que los empleados desaten su creatividad para su propio beneficio. Abre la puerta y deja que deambulen, aprendan y sean creativos. Seguramente van a vagar, pero, debido a lo positivo que es su lugar de trabajo, volverán.