Hace un tiempo leí lo siguiente:
“Yo soy tu constante compañero.
Yo soy tu mejor ayuda o tu peor
carga.
Yo te empujaré hacia adelante o
hacia el fracaso.
Yo estoy completamente bajo tus
órdenes.
La mitad de las cosas que tú
haces, deberías dármelas a mí.
Yo las haré más rápido y
correctamente.
Me puedes manejar fácilmente.
Simplemente se firme conmigo.
Enséñame exactamente cómo quieres
que se haga algo,
Y luego de unas cuantas lecciones
lo haré automáticamente.
Yo soy el sirviente de los
grandes hombres y mujeres,
Y también, de los peores
fracasados.
Los que son grandes, los he hecho
grandes.
Los que son fracasados, los he
hecho fracasar.
Tú me puedes usar para producir
ganancias o para llevarte a la ruina.
Da lo mismo para mí.
Tómame, entréname, se firme
conmigo.
Y pondré el mundo a tus pies.
Sé débil conmigo, y te destruiré.
¿Quién Soy?
¡Soy un Hábito!”
Conversando con un amigo que es
piloto de avión me explicaba que después de colocar el plan de vuelo en el
sistema del avión (aeropuerto actual, aeropuerto de destino, altura que vas a
volar, etc.), despegar y llegar a la altura deseada, colocaba el avión en
piloto automático.
Este “piloto automático” lleva al
avión al destino deseado manteniendo la altura definida. Antes del momento del
aterrizaje, el piloto nuevamente toma control.
El “piloto automático” es una
magnífica ayuda sí y solo sí defines claramente el plan de vuelo (a donde
quieres llegar, como quieres llegar, cuando quieres llegar). Si no tienes el
plan de vuelo claro, el “piloto automático” es inútil o inclusive peligroso.
Muchas veces nosotros encendemos
nuestro “piloto automático” sin tener claro el plan de vuelo y en consecuencia,
terminamos en un lugar completamente distinto al que deseábamos.
Ese “piloto automático” son
nuestros hábitos.
Todos estamos manejados por
nuestros hábitos. Si no existieran los hábitos, tendríamos que pensar antes de
cada acción en todo momento. Los hábitos nos ayudan a descargar la mente
consciente de decisiones que ellos toman automáticamente. Son nuestro
“piloto automático”.
A continuación te dejo 6 Claves
para desarrollar hábitos positivos:
1- Conecta
el cambio que quieres hacer con tu visión:
Es común que personas comienzan a
trabajar en buenos hábitos por el simple hecho de que son buenos hábitos, sin
conectarlos con la visión que tienen para su vida. A la larga sólo trae
frustración y fracaso.
Por ejemplo, si tu plan de vida
incluye ser una persona saludable, puedes caer en el error de intentar
desarrollar hábitos de un atleta llevándolo al extremo. Si tu plan es ser un
atleta, desarrolla hábitos de atleta, si es ser una persona saludable,
desarrolla hábitos que te hagan más saludable al nivel que quieres llegar.
2- Invierte
gran energía en desarrollar el hábito por 6 semanas y comienza en las próximas
48 horas:
Nuevas investigaciones en el tema
de los hábitos aseguran que 6 semanas es el tiempo necesario para desarrollar
un hábito. Enfócate en desarrollar el hábito que quieres desarrollar y
comprométete por 6 semanas como mínimo.
¿Por qué comenzar en las próximas
48 horas? Porque la mayoría de las personas pasan su vida planeando los hábitos
que quieren desarrollar y nunca comienzan. Comienza ya y después ajusta.
3- Enfócate
en lo que quieres, no lo que estás eliminando:
Muchas veces nos enfocamos en lo
que estamos tratando de eliminar en vez de tener la mirada fija en lo que
queremos lograr. No pienses en lo que la dieta que escogiste te está
prohibiendo comer, piensa en la persona en que te vas a convertir como
resultado de desarrollar el hábito de comer saludable.
No te enfoques en el sacrificio,
enfócate en el logro. Te hará el camino mucho más fácil.
4- Enfócate
en pocos cambios a la vez:
Uno de los errores más comunes es
que las personas deciden cambiar toda su vida de la noche a la mañana. Deciden
que no soportan más vivir así y dejan el cigarro, comienzan a comer saludable,
se inscriben en un gimnasio, se compran un buen libro para retomar la lectura,
tiran el televisor a la basura y donan 10% de su ingreso a una causa noble.
Salvo en pocas excepciones, no
logran los resultados y vuelven a los antiguos hábitos.
La clave está en no olvidar que
los malos hábitos se desarrollaron poco a poco a lo largo de mucho tiempo. De
la misma manera necesitamos ir desarrollando los buenos, poco a poco.
Independientemente que quieras
cambiar todo en tu vida, comienza con uno o dos hábitos hasta que lo domines,
luego agrega otro y cambia poco a poco. No es una carrera, es un proceso.
5- Sé
preciso en qué habito quieres desarrollar:
Proponerse desarrollar hábitos
ambiguos no ayuda mucho. Por ejemplo, desarrollar el hábito de la generosidad
es ambiguo. Desarrollar el hábito de donar un 10% de tu ingreso a tu iglesia,
caridad o alguien necesitado es un hábito mucho más preciso.
¿Ser saludable? Ambiguo. ¿Caminar
30 minutos por 5 días a la semana? Mucho mejor. ¿Desarrollar una vida
espiritual más profunda? Ambiguo. ¿Orar todos juntos como familia antes de
acostarnos en acción de gracias por el día que nos fue dado? Mucho mejor.
Asegúrate de especificar cuál es
la acción que necesitas ejecutar en el hábito.
6- Crea
un ambiente de soporte
Con el objetivo de comer más
saludable mi esposa y yo decidimos eliminar los carbohidratos procesados de nuestra
dieta 6 días a la semana (y el sábado es la recompensa, podemos comer lo que
queramos).
¿Cómo desarrollamos un ambiente
de soporte? No compramos carbohidratos procesados cuando vamos al mercado. Me
llevo la comida lista al trabajo (ahorro dinero y elimino la tentación de
salirme de la dieta), nos apoyamos mutuamente en los momentos duros, etc.
El punto que quiero transmitir es
que necesitas desarrollar una atmósfera que facilite la creación del hábito y
te aleje de la tentación de volver atrás. Por ejemplo, conozco personas que
botaron a la basura las tarjetas de crédito para poder salir de deudas; otros
van a dormir con su ropa de correr para estar listos al despertarse y salir a
hacer ejercicio a primera hora.
¿Qué nuevos hábitos vas a
desarrollar? ¿Qué hábito se te ha hecho difícil romper y que hiciste para
superarlo? ¿Cuál es el hábito más importante que tienes en tu vida en este
momento? Por favor ve al área de comentarios abajo y cuéntanos sobre el mismo.
Recuerda que el agua, gota a
gota, rompe la roca. Tus hábitos te harán una persona saludable o enferma, una
persona próspera o pobre, una persona llena de amigos o solitaria. Día a día,
definirán tu destino.
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