Experiencias

Rodolfo Salas: Facilitador y potenciador sobre conocimientos de liderazgo, estrategia, marketing y gestión de los negocios.

Fortalezas: Dirigir, inspirar e integrar a otros con una gran energía, Aceptar cambios de forma positiva, Desarrollar relaciones con otros, Ser más visible y Tener un alto grado de compromiso.

martes, junio 21, 2016

10 lecciones aprendidas de los malos jefes


Shellie Karabell en forbes.com del pasado 5 de junio plantea que se ha escrito mucho sobre lo que caracteriza a un mal jefe, sobre cómo evitarlos y sobre cómo detectar que se trabaja para uno de ellos, pero el problema surge al analizar qué podemos hacer si nos toca uno.

Karabell propone, en la creencia de que lo que sí realmente podemos cambiar es nuestro punto de vista, que nos fijemos en las 10 cosas que los malos jefes, al no hacerlas y actuar de forma contraria,  nos pueden enseñar sobre buen liderazgo, para el día en que les sustituyamos. Son las siguientes:

1.- Respeto mutuo.

“Para manejarte a ti mismo utiliza la cabeza, pero para manejar a los demás usa el corazón”.

Eleanor Roosevelt

2.- La comunicación es un camino de doble sentido.

“El día en que los soldados dejen de traerte sus problemas es el día en que has dejado de liderarles. Significa que  han perdido la confianza en que les puedes ayudar o han llegado a la conclusión de que no te importan. En cualquiera de los casos supone un fallo de liderazgo”.

Colin Powell

3.- Actuar como un jefe y no dudar en demostrarlo tomando decisiones cuando son necesarias, no esperando hasta el último momento para demostrar quién tiene la autoridad y sabotear las iniciativas de los demás.

 “Un líder es como un pastor. Marcha detrás de su rebaño, dejando que los más ágiles y diestros vayan delante,  el resto les sigan no siendo conscientes que están siendo dirigidos por detrás”.

Nelson Mandela

4.- Retribuir de forma justa y equitativa. El salario es un signo del valor que se le concede a la persona.

“Management es hacer las cosas bien. Liderazgo es hacer las cosas correctas”.

Peter Drucker

5.- Contratar a buenos profesionales y compartir con ellos nuestra visión y dejarles libertad para alcanzarla de su manera propia. Hay que confiar en los colaboradores, aclarar el camino para que alcancen nuestros objetivos y no interferir en su trabajo diario.

“No hay que decir a las personas cómo tienen que hacer las cosas, hay  que decir lo que es necesario hacer y dejar que nos sorprendan con sus resultados”.

George Patton

6.- Dar el crédito a los demás y asumir las culpas.

“La medida última de un hombre no es dónde se encuentra en los momentos de confort sino cómo se comporta en los momentos de controversia y desafío”.

Martin Luther King, Jr.

7.- No tener favoritos. Si lo hacemos podemos estar marginando los talentos del resto de los profesionales.

“Si quieres construir un barco, no dediques a tus hombres a recoger madera, a dividir el trabajo y a dar órdenes. En lugar de eso enséñales a suspirar por el vasto mar”

Antoine de Saint Exupery

8.- Mantener las distancias. Los profesionales con los que trabajamos no tienen por qué soportar la carga de nuestros problemas.

“Los líderes deben mantenerse lo suficiente cerca para relacionarse con sus colaboradores pero lo suficientemente lejanos para motivarles”.

John C. Maxwell

9.- Liderar con el ejemplo. Las acciones siempre hablan más alto que las palabras.

“El ejemplo no es lo principal para influir en los demás es lo único”.

Albert Schweitzer

10.- Confiar en los colaboradores. La confianza que demos retornará.

“Existe una diferencia entre ser un líder y ser un jefe. Ambos se basan en la autoridad. Un jefe demanda obediencia ciega, un líder obtiene su autoridad a través de la comprensión y confianza”.

Klaus Balkenhol

Por último, la autora recomienda el sentirnos  cómodos ejerciendo el liderazgo.

“Es complicado dirigir una carga de caballería si pensamos que parecemos ridículos montados a caballo”.

Adlai Stevenson II

lunes, junio 20, 2016

¿Cómo se escribe un buen resumen ejecutivo?


Un buen resumen ejecutivo puede ser la llave que abra la puerta a una gran inversión o a nuevos contactos. Pero no siempre es fácil condensar la información de manera que sea clara y no pierda profundidad.

El resumen ejecutivo es algo así como el aperitivo que se sirve al inicio de una cena para despertar el interés de los comensales. A la hora de enfrentar a un potencial inversionista o a un banco, sucede lo mismo: hay que aprender a seducir y a generar expectativas positivas sobre el proyecto. No sólo es un resumen de un plan de negocios: es la primera arma de ventas. ¿Cómo se logra crear uno que sea efectivo?

Diseñar un resumen visual

El resumen ejecutivo debe ser lo suficientemente largo como para explicar el proyecto de negocios en todas sus dimensiones, pero lo bastante breve como para que el lector no se canse en las dos primeras hojas. Además, debe invitar a leer el resto. Pero lo más importante: debe estar diseñado visualmente, de tal forma que el inversionista, por caso, pueda "escanear" el texto y darse cuenta al primer vistazo de qué se trata el proyecto. 

Posiblemente se este frente a un público que no tenga mucho tiempo para detenerse en cada frase. Hay que comenzar a estructurar muy bien qué dirá cada título y subtítulo dentro del texto y, de ser posible, destacar en negrita las frases o conceptos destacados. Armar un "flujo de ideas" de tal forma que puedas priorizar qué es lo más importante

Si es corto es bueno. Si es corto y claro, excelente

Para diseñar una óptima estructura visual se debe analizar en detalle qué se quiere decir y presentar con certeza los argumentos más fuertes. Evitar ser repetitivo, pero asegurarse que el público entienda el punto con sólo una lectura breve. Se pueden hacer ejercicios con amigos y conocidos. Que lean el texto en forma rápida y que digan qué entienden. Luego, que lo hagan una segunda vez, pero ahora con más pausa. Lo más importante del resumen es: cuál es el negocio, cómo opera el negocio y cómo se consiguen ganancias en el negocio.

Si no somos visuales, pedir ayuda

Dice el refrán que sólo hay una oportunidad para causar una primera buena impresión. Por lo tanto, no se puede desperdiciar. Si ya se tiene claro qué se va a decir y cómo nos gustaría presentarlo, buscar el modelo que mejor se adapte al proyecto: desde los colores de la tipografía y el fondo de la hoja, hasta el diseño general de la presentación. Si nuestros talentos no van por el lado visual, hay que pedir ayuda. Si llegamos a este punto y se han destinado cientos de horas a preparar el contenido del plan de negocios. Entonces, conviene invertir un poco más y buscar la colaboración de un profesional en diseño gráfico.

domingo, junio 19, 2016

Gran Hermano como modelo de organización arbitraria

Aunque sea un "juego", se trata de un trabajo, donde los participantes pugnan por permanecer en un esquema que les permite aspirar a mayores recompensas.

La mecánica del programa Gran Hermano lleva varias temporadas, no solo en Argentina, sino en muchos países del mundo. El esquema común es bastante simple: se encierra en una casa a un grupo de jóvenes de ambos sexos, no elegidos al azar sino previamente seleccionados por sus características físicas y psicológicas.

La diversidad de intereses e historias previas es condición necesaria, porque deben convivir durante varias semanas para competir y pasar a ser el ganador, es decir, el último que permanezca en la casa. Porque de esto se trata el denominado "juego". Establecer alianzas, distribuir afectos y odios con sutiles mentiras o verdades, que apunten a que otro sea el despedido.

Los participantes deben ser necesariamente sumisos, obedientes a un personaje invisible, una especie de CEO, quien interviene con una voz grave y autoritaria. Quien se rebela, corre grave peligro de expulsión. Permanentemente vigilados visual y auditivamente, se aceptan ciertos excesos en tanto gratifique a la audiencia (seducciones, sexo no explícito, una confesión escandalosa, etcétera), siempre dentro del marco del rating. 

El programa merece la redacción de varios volúmenes producidos por psicólogos sociales, filósofos, psiquiatras, antropólogos y especialistas en Recursos Humanos. En definitiva, se trata de una versión particular de organización, donde no se produce nada concreto, excepto la exhibición de la competitividad impúdica para evitar la expulsión individual.

Para decirlo de otro modo, es todo lo contrario de lo que puede esperarse para la buena marcha de una empresa, una maraña de conflictos alentados al extremo en cada emisión. El gran atractivo son los expulsados, los perdedores. Un modelo negativo y, en algún punto, perverso. En las competencias deportivas serias, el ganador es el que llama toda la atención, pero no es este el caso de las decisiones que se van acumulando semana a semana. Es el mundo al revés si se aplicara el mismo modelo en una organización.

Curiosamente, la novela 1984 de George Orwell, sobre la que se inspiró el programa de TV, fue una distopía que alertaba sobre los peligros de los totalitarismos extremos que amenazaban con reinar en este mundo, el fascismo y el stalinismo. También curiosamente, lo han convertido en una atracción masiva, lo que abre grandes incógnitas. Esto es, por qué esta sofisticada barbarie logra atraer tanto público.

Hace algunos años había otro programa televisivo conducido por el actual candidato a presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. El momento culminante, donde la tensión llegaba a su apogeo, era cuando el señor poderoso, rubio y atildado anunciaba con dureza a algún participante: "Estás despedido".

También invita a revisar este fenómeno bajo la óptica de su validez a pesar de contextos diferentes. Cuando Orwell escribió su novela, a fines de los años 40, los totalitarismos absolutos estaban a la vuelta de la esquina, regímenes supuestamente superados, pero claramente seductores aún hoy.

En suma, la televisión enseña, es una gran escuela, siempre y cuando se pueda discernir entre lo bueno y lo nocivo. Gran Hermano genera incertidumbre, es desconocido, arbitrario y poco misericordioso. No es un liderazgo que genere adeptos, sino todo lo contrario en momentos en los que aún suenan las campanas del trabajo en equipo, la comunicación interactiva y el cuidado "del capital más importante de la empresa", los recursos humanos.

sábado, junio 18, 2016

El secreto de Primark para vender la ropa más barata


Primark, perteneciente al grupo Associated British Foods (ABF), cumple 10 años en España como la firma low cost por excelencia de nuestro país. Sus reducidos precios le han convertido en la primera cadena de moda en España por número de clientes, superando a la marca insignia de Inditex, Zara.

Según datos de Kantar Worldpanel, Primark contaba con más de 8,9 millones de clientes en 2015, seguida por Zara, con 8,2 millones de compradores. La compañía también lidera el ranking por número prendas vendidas, con una cuota de mercado del 8,4%, es decir, más de ocho de cada cien prendas que se compran en España salen de las estanterías de Primark, según la misma consultora.

John Bason, director financiero de ABF, ha desvelado las claves de la compañía para ofrecer los precios los más baratos:

-"Primark apenas hace publicidad, lo que le permite mantener precios bajos", señaló el directivo.

-"Compra grandes volúmenes de prendas, lo que permite a los proveedores ofrecer precios más bajos a la compañía y realizar eficiencias de escala como comprar género al por mayor", señala.

-"Primark compra la mayor parte de sus productos directamente a los proveedores", por lo que evita intermediarios y reduce costes.

-"La cadena tiene un margen muy inferior al de muchos de sus competidores", añade.

-Adicionalmente, sostiene que "en la medida de lo posible, el abastecimiento de materias primas se realiza cerca del lugar donde se fabrican las prendas, como Bangladesh, India y Pakistán, lo que también ayuda a mantener los costes bajos".

-La compañía sostiene que la Unión Europea trata de fomentar el comercio eliminando los aranceles de mercancías importadas de países, como Bangladesh. "Primark concentra su abastecimiento en muchos de estos países, permitiendo apoyar sus economías y trasladar los beneficios de costes más bajos a sus clientes.

Pese a los precios bajos, el ejecutivo defiende que garantiza un abastecimiento responsable, en términos de medioambiente y derechos humanos.

Explica que Primark cuenta con un estricto código de conducta de obligado cumplimiento para todos los proveedores. Recoge la normativa internacional y establece los principios fundamentales en materia de condiciones laborales, salarios justos y derechos de los trabajadores.

Junto a ello, Primark hace especial hincapié en la auditoría y la supervisión. Solo en 2015, Primark realizó 2.629 auditorías en las fábricas de sus proveedores para asegurarse del cumplimiento del citado código. Un equipo de más de 65 especialistas realiza una labor de campo en los países clave de abastecimiento que incluyen India, Turquía, Bangladesh, China y Pakistán. El equipo recibe el apoyo de auditores externos, en los próximos meses la plantilla interna alcanzará 80 personas.

Negocio en España

Primark abrió su primera tienda en España en mayo de 2006 con la apertura de su primera tienda en Plenilunio (Madrid) y, desde entonces, ha ampliado su presencia a Barcelona, Gran Canaria, Sevilla, A Coruña o Málaga, entre otras localidades.

En octubre del año pasado, desembarco en la Gran Vía madrileña con una tienda flagship de de 12.356 metros cuadrados, la segunda mayor del grupo, sólo por detrás de la tienda de Manchester. En esta tienda trabajan 400 empleados, de los que la mitad tiene un contrato indefinido. Perciben el salario que marca el convenio de comercio, de 13.000 euros brutos al año.

Las ventas de Primark en España aumentaron en el último ejercicio fiscal un 16% hasta los 920 millones de euros. Bason asegura que, tras 10 años en España, su objetivo para la próxima década es replicar lo que han hecho hasta ahora en España y considera que hay potencial y recorrido en el país para duplicar su negocio.

Actualmente, la cadena cuenta con más de 5.000 trabajadores en plantilla repartidos en 41 tiendas en España.

El almacén de Primark para España está en Torija, un centro logístico que da servicio a España, Portugal y el sur de Francia y que duplicó su tamaño a principios de 2015. En la actualidad cuenta con 84.000 metros cuadrados.

viernes, junio 17, 2016

Diversidad cultural: el desafío más actual de las empresas globales


Hacer negocios en el mundo no solo exige entender las diferencias de los mercados; hay que aprender también a liderar equipos de personas de varias nacionalidades.

Cada vez más, las organizaciones incursionan en mercados lejanos, donde las diferencias y barreras no son sólo idiomáticas sino de costumbres, creencias, normas y valores. Y a su vez, incorporan empleados de diversos orígenes, nacionalidades, razas y religiones. Gestionar adecuadamente la diversidad genera ventajas competitivas: mayor atracción y retención del talento, detección de nuevas oportunidades de negocios, reducción de los conflictos y mayor satisfacción de los clientes y compromiso de los empleados, entre otras.

"Contar con equipos multiculturales permite una mejor llegada a los clientes y a la comunidad", apunta Andrea Ávila, de la consultora en Recursos Humanos Randstad. "La diversidad cultural tiene un impacto cuantitativo en mayores ventas y utilidades, porque al generar equipos de trabajo complementarios, la creatividad y la innovación se incrementan, y mejora la toma de decisiones ya que aporta mayor amplitud de puntos de vista y soluciones", destaca.

En el día a día, las organizaciones implementan desde programas de asistencia a ejecutivos y empleados expatriados, cursos de idiomas, rotaciones de puestos laborales en el exterior y formación de redes de trabajo y de intercambio globales.

IBM (fundada en 1911 en Estados Unidos y con 380.000 empleados en 170 países) es una de las compañías pioneras en desarrollar un programa de Diversidad e Inclusión, entre cuyas iniciativas se cuenta la de "adaptabilidad cultural". "No solo trabajamos con coaching cultural para expatriados, sino que brindamos herramientas a las personas que viajan a otros países y a quienes trabajan en equipos globales", destaca Carolina Russo, Diversity Program Manager para el Cono Sur. "La idea es que cada profesional sea capaz de colaborar y compartir recursos más allá de las fronteras y unidades de negocios. Para esto se requieren habilidades de comunicación efectiva, escuchar activamente, tener empatía, respetar horarios, costumbres y permanecer abierto a ideas", enumera.

En Schneider Electric, compañía tecnológica de origen francés con 170.000 empleados en más de 100 países, la diversidad cultural y de género son pilares en el negocio. "Ofrecemos entrenamientos globales y trabajo transcultural a nuestros empleados, y valoramos los beneficios que la diversidad aporta tanto en lo personal como en lo profesional", destaca la brasileña Tania Cosentino, vicepresidenta de la Compañía para Sud América. "Hay grandes aprendizajes y evolución cuando compartimos conocimientos, buenas prácticas y casos de éxito con clientes y empleados del mundo. Esto nos permite ser más eficientes al brindar soluciones en los diferentes mercados". La ejecutiva destaca también que la empresa forma parte de la campaña HeforShe, un movimiento solidario internacional que invita a hombres y niños a abogar y tomar medidas por la igualdad de género.

Hoy la búsqueda de talento no se circunscribe a un país sino que suele ser global, y los candidatos deben contar con aptitudes para adaptarse a los cambios culturales y gestionar equipos diversos y remotos. Por esto muchas compañías tienen programas de intercambios o asignaciones de proyectos en otros países, y acompañan a los "expatriados" en su integración a la nueva comunidad. En Assist Card (fundada en 1972 en Suiza, presente en 190 países, 500 empleados en Argentina), desarrollan programas de intercambio regionales, asistencia y capacitación a los expatriados durante el primer año, y cobertura de viajes a su país de origen para que puedan mantener el contacto con sus seres queridos, destaca Orlando Romano, gerente regional de Compensaciones y Beneficios.

En Bridgestone (fundada en 1900 en Estados Unidos, con 1500 empleados en Argentina, donde instaló su primera planta industrial en 1931), brindan asistencia al personal expatriado y su familia, colaborando con la búsqueda de vivienda, colegio y cursos de idioma, destaca Carlos Saco, director de Recursos Humanos y Asuntos Corporativos.

La compañía de origen holandés Philips (presente en 100 países, con 7000 empleados en América latina), ofrece programas de expatriación, que "incluyen una capacitación cultural y consultoría profesional para que su pareja pueda conseguir trabajo en el nuevo destino", detalla Santiago Baistrocchi, gerente de Recursos Humanos Cono Sur.

Factor de innovación

En la firma de cosmética Natura (7000 empleados, fundada en Brasil en 1969 y con presencia en seis países incluida la Argentina desde hace 20 años), la multiculturalidad es un eje central para su estrategia de diversidad. "Lo que hace que un grupo sea verdaderamente innovador es la combinación de generaciones, habilidades, estilos de trabajo y formas de pensar", destaca Mariana Talarico, Gerente Regional de Recursos Humanos para Latinoamérica. La compañía ofrece programas de rotación internacional y asistencia a expatriados.

La sensibilidad intercultural y la capacidad de adaptación a entornos culturales diversos son claves en el actual mundo del trabajo. "Estas aptitudes pueden entrenarse, y van mucho más allá del conocimiento de idiomas", afirma Juan Medici, director ejecutivo de AFS, una Organización de Intercambio Cultural estudiantil que comenzó a ofrecer servicios de "entrenamiento en competencias globales" a otras organizaciones y compañías. La capacitación se basa en el Modelo de Desarrollo de la Sensibilidad Cultural creado por el psicolingüista estadounidense Milton Bennett. Este esquema se basa en seis estadíos, que van de la "negación" de las diferencias culturales, pasando por la actitud defensiva, la minimización, la aceptación, adaptación y finalmente la integración cultural.

A partir de fusiones y adquisiciones, el laboratorio Novartis (creado en 1996 por la unión de Ciba Geigy y Sandoz, y luego la norteamericana Alcon, con 119.000 empleados de 144 nacionalidades), implementó un programa de Diversidad e Inclusión a Nivel Mundial. "Pensamos que la diversidad es una realidad, pero la inclusión es una opción", señala Marisa Ventura, directora de la división Oftalmología y Líder de Inclusión y Diversidad en Argentina. "En un mundo globalizado, la capacidad de armar equipos de trabajo dispersos, con distintas costumbres y husos horarios, plantea desafíos hasta en las cuestiones más triviales, así como diferencias sutiles en el lenguaje. Porque lo que en Argentina calificamos como "bastante bueno" y significa que hay espacio para mejorarlo, en otros lugares de Latinoamérica es interpretado como muy bueno o excelente", grafica Ventura.

Parecidos, pero diferentes
  • Un abanico de idiomas, de religiones distintas, costumbres, creencias, normas y valores que cambian. Son los desafíos que trae la globalización y que van más allá de la caída de las fronteras a la hora de pensar en los negocios corporativos
  • Gestionar adecuadamente la diversidad cultural genera ventajas competitivas, como la mayor atracción y retención de talento y el aumento del nivel de compromiso de los empleados, entre otras
  • Respetar las diferencias, es el mensaje principal que aprenden quienes lideran grupos diversos
  • Una mejor llegada a los clientes y a las comunidades es otro beneficio de los equipos multiculturales y tiene impacto en ventas y utilidades
María Gabriela Ensinck

jueves, junio 16, 2016

El valor de un equipo: “Si quieres llegar pronto, ve solo; si quieres llegar lejos, ve acompañado”


Se insiste mucho en hablar de la importancia del equipo a la hora de conseguir resultados excelentes. En la Grecia Clásica, hace ya dos mil quinientos años, se usaba la palabra Areté para hablar de la excelencia en el cumplimiento de una misión. ¿Qué es lo que hace que no los simples grupos, sino los verdaderos equipos alcancen esa excelencia? Para mí son cuatro cosas:

  • En los equipos, sus miembros se ocupan unos de otros más de lo que es cómodo.
  • En los equipos, sus miembros se arriesgan más de lo que parece seguro.
  • En los equipos, sus miembros sueñan más de lo que parece práctico.
  • En los equipos, sus miembros esperan más de lo que parece posible.

El nivel tan alto de competitividad que un equipo puede alcanzar, solo se logra si previamente se ha creado un ambiente de auténtica y profunda cooperación. Eso es lo que permite que se produzca el encuentro. Al final no es que uno más uno sea más que dos, sino que cuando “los oxígenos” se unen a “los hidrógenos”, surge algo completamente nuevo y que no es predecible en base a las competencias y cualidades de partida. Efectivamente, aunque el agua procede de la unión entre el oxígeno y el hidrógeno, sus características físico-químicas no pueden ser deducidas de sus gases de partida. Tampoco el oxígeno y el hidrógeno reaccionan espontáneamente, sino que precisan de unas condiciones para el encuentro y que en el caso de estos dos gases, son una presión y una temperatura determinadas. ¿Qué es lo que hace que las personas queramos cooperar hasta ser capaces de generar algo nuevo? ¿Qué es lo que nos eleva a este plano de la creatividad en el que surgen nuevas posibilidades? Desde mi experiencia son una serie de elementos que pasaré a describir y que lo que hacen es crear esos lazos afectivos que forman la base imprescindible para luego alcanzar grandes metas:

  • Interés por las otras personas, por lo que sienten, por lo que necesitan, por lo que anhelan, por aquello que les preocupa.
  • Agudeza sensorial para captar aquellas pequeñas señales, muchas veces no verbales, y que de alguna manera expresan el tipo de experiencia que está teniendo una persona.
  • Empatía, capacidad de conectar con el mundo afectivo del otro, no solo desde el intelecto, sino también desde la emoción.
  • Capacidad de escucha, que no es nada más y nada menos que tener una presencia total frente al otro. Cuando alguien siente que se le presta plena atención, se siente valorado y puede empezar a confiar.
  • Curiosidad para preguntar, explorar, conocer y descubrir en lugar de simplemente juzgar de forma automática y precipitada, siguiendo nuestros propios modelos mentales, nuestra propia cosmovisión.
  • Asertividad para expresar el propio sentir, sin deseo de herir, tan solo de ayudar.
  • Generosidad para dar sin esperar recibir.
  • Humildad para saber pedir ayuda y también para dejarse ayudar.

Cuando se ha creado esta sólida base de comprensión, valoración y apoyo mutuo, entonces se puede avanzar confiado en pos de las más altas metas. Es aquí donde una visión, algo que inspire al equipo a “ponerse de puntillas”, a estirarse al máximo, hace que mentes y corazones se alineen para alcanzar una meta común.

Todo esto es especialmente relevante en entornos VUCA como el actual tan marcados por la volatilidad, la incertidumbre, la complejidad y la ambigüedad. En estos entornos donde la presión es tan elevada, nuestros cerebros tienden a ponerse en modo de hipervigilancia e incluso de alarma, al sentirnos de alguna manera amenazados ante un mundo que ya no nos es ni tan conocido, ni tan familiar. Una persona con un alto nivel de inquietud o de ansiedad no toma decisiones y si las toma, suelen ser poco acertadas. Además a alguien con tanta tensión mental, le cuesta centrarse en lo importante y tiende a distraerse con facilidad. Su inteligencia, su creatividad y su capacidad de aprendizaje se resienten como también lo hace su salud. ¿Será que en los equipos, al sentir todos, el apoyo de sus compañeros, al saber que pueden fiarse unos de otros y que si cometen un error en lugar de ser acusados por los demás, estos les van a ayudar a resolverlo, consigue mantener su eficiencia incluso en entornos de gran presión? Así es y hay una base fisiológica para demostrarlo. La conexión emocional entre los seres humanos produce la liberación en la sangre de una hormona llamada oxitocina, también conocida como la hormona del encuentro. La oxitocina permite que ciertas áreas del cerebro se mantengan alerta, sin que se activen los mecanismos de hipervigilancia y alarma. Por eso, los verdaderos equipos siguen moviéndose de manera inteligente y creativa en medio de la presión.

En un mundo como el actual donde la cooperación es la clave de la adaptación, nos viene muy bien recordar las palabras de Charles Darwin: “No es la especie más fuerte ni la más inteligente la que sobrevive, sino la que mejor se adapta”. Si pertenecemos al 0,1% de las especies que han sobrevivido en este planeta y, según Darwin, la inteligencia no ha sido la causa, entonces tiene que haber otro factor clave que tal vez nos convenga recordar y que yo diría que es la importancia de saber cooperar. ¿Será que un cerebro egoísta que se ve como el centro de una única circunferencia está destinado a desaparecer y que dos cerebros cooperadores que se convierten en los dos centros de algo más amplio, de una elipse, están llamados a adaptarse, sobrevivir y progresar?

Remito al lector y a la lectora a revisar su propia experiencia porque es en ella donde encontrarán algo mucho más íntimo y valioso que lo que les pueda yo transmitir. Tal vez le pueda señalar hacia allí, pero solo usted lo puede llegar a descubrir.

Si los valores son todo aquello que nos perfecciona como personas, quizás sea el interés por el otro, la empatía, la asertividad, la generosidad y la humildad lo que nos mejore como seres humanos y también como especie. Quien se ve así mismo en los demás y quien ve a los demás dentro de sí, deja de tener miedo.

Hoy en día, una empresa que simplemente consiga buenos resultados no parece que pueda aspirar a tener un gran futuro. Sólo las empresas que consiguen resultados excepcionales suelen tenerlo. Difícil entender que se alcancen tales resultados sin contar con las personas  y con su capacidad para formar equipos plenamente comprometidos.

miércoles, junio 15, 2016

Ocho factores claves en la estrategia de innovación

No cabe duda de que las compañías innovadoras se destacan del resto. Pero además se sabe que es una tarea nada fácil. Por lo general, las compañías que ya están bien establecidas en su sector son mejores ejecutando que innovando.

Casi siempre su éxito proviene más de mejorar el negocio que ya tienen que de una creatividad capaz de cambiar el juego por completo.

"Es cierto que es difícil, pero hay algunas que lo logran", dice el directivo de McKinsey Nathan Marston en un ensayo publicado por esa organización donde explica por qué la innovación es cada vez más importante para el crecimiento de la empresa. Concretamente habla de ocho elementos fundamentales que deben estar presentes para conseguir innovar. No es imposible que innoven las empresas grandes: Alcoa innova, el Centro de Investigaciones de la NASA innova y el Discovery Group innova. El ensayo de Marston resume una investigación que llevó años de entrevistas, talleres y encuestas entre más de 2.500 ejecutivos en más de 300 compañías de cualquier sector y de cualquier país. 

El equipo de investigadores resumió los resultados en un conjunto de ocho atributos esenciales que están presentes, sea en parte o en el todo, en toda gran empresa que se destaca en innovación de producto, proceso o modelo de negocios. 

De todas maneras, obviamente, aclaran que no hay fórmula probada que garantice el éxito, especialmente en lo que hace a innovación. Hecha esta aclaración el equipo de investigadores cree que si las compañías asimilan y aplican esos factores esenciales a su propio modo y de acuerdo con su contexto particular, capacidades y cultura organizacional además de la inclinación al riesgo, seguramente mejorarán la posibilidad que tienen de hacer renacer esa chispa perdida para la innovación. 


ASPIRAR

La audaz aspiración del presidente John F. Kennedy en 1962 de llegar a la luna en esa década motivó que toda la nación llegara a niveles de innovación sin precedentes. Una visión audaz puede convertirse en catalizador siempre que sea lo suficientemente realista como para estimular la acción hoy.  Pero en una empresa, como muchos CEO han descubierto, hasta las palabras más cautivadoras suelen ser insuficientes aunque se repitan incansablemente. Ayuda mucho combinar esas aspiraciones con la explicación del valor que esa innovación podría generar para cumplir con los objetivos financieros y de crecimiento. Cuantificar una meta de innovación para crecimiento y hacer explícita una parte de los futuros planes estratégicos ayuda a solidificar la importancia de la innovación. El objetivo debe ser lo suficientemente grande como para incluir inversión en innovación en sus planes de negocios.  Pero instalar una aspiración cuantitativa no es suficiente. El valor a que se aspira debe ser asignado a los "propietarios" relevantes de la empresa para luego filtrar hacia debajo de la organización en forma de metas y plazos. De lo contrario se puede favorecer la inacción o la convicción de que la innovación es trabajo de los demás.  Por ejemplo, una gran cooperativa agrícola nórdica, Lantmännen, sufría crecimiento orgánico chato y cero innovación. La alta gerencia creó una visión aspiracional y un plan estratégico ligado a objetivos financieros: 6% de crecimiento del negocio central y 2% de crecimiento en los nuevos emprendimientos. Para fomentar proyectos de innovación, esas metas cuantitativas fueron bajando hasta las unidades de negocios y en última instancia a los grupos de productos. Durante el desarrollo, cada proyecto de innovación tenía que demostrar de qué manera estaba contribuyendo a lograr las metas de crecimiento para su categoría y sus mercados. Como resultado, la empresa pasó de 4% de crecimiento anual a 13% gracias al exitoso lanzamiento de varias marcas nuevas. Se convirtió en líder en comida pre cocida sólo cuatro años después de su entrada y creó un nuevo segmento premium en ese mercado.

ELEGIR

Las dificultades con que tropiezan muchas compañías no provienen tanto de la falta de ideas creativas sino del difícil proceso de decidir cuáles merecen apoyo y escala. La innovación siempre es riesgosa y para sacar el mayor provecho posible a una cartera de iniciativas innovadoras no hay que tratar de eliminar el riesgo sino aprender a manejarlo. Como nadie sabe exactamente de dónde van a salir las innovaciones valiosas y buscar en todas partes no es práctico, los ejecutivos deben crear algunas condiciones límites para los espacios de oportunidad que quieren explorar. El proceso de identificar y conectar esos espacios puede transitar todo el espectro que va desde la visión intuitiva del futuro hasta el análisis estratégico cuidadosamente estudiado. Priorizar esos espacios también permite a las compañías evaluar si tienen suficiente inversión puesta detrás de las oportunidades más valiosas.  Durante este proceso, las empresa deberían poner en marcha más proyectos que los que van a poder financiar, con lo cual será más fácil matar los menos prometedores. Una vez que las oportunidades han sido definidas, las empresas necesitan transparencia en cuanto a en qué trabaja la gente y un proceso de gobernanza que constantemente evalúe no solo el valor esperado, el tiempo y el riesgo de las iniciativas en la cartera sino también su composición general. No hay una única combinación que sea la universalmente correcta. La mayoría de las compañías establecidas se equivocan cuando sobrecargan la cadena de innovación con proyectos relativamente seguros, de corto plazo e incrementales que tienen pocas posibilidades de lograr sus objetivos de crecimiento o de mantenerse dentro de sus parámetros de riesgo. Algunas se marean con demasiados proyectos en lugar de concentrarse en aquellos con mayor posibilidad de éxito y de financiarlos para ganar.  Esas tendencias se refuerzan por un lento proceso de reasignación de recursos. La investigación de McKinsey muestra que las empresas reasignan solo una pequeña fracción de sus recursos anuales, y así sentencian la innovación a una aplastante marcha de incrementalismo. 

DESCUBRIR

La innovación requiere conocimientos diferenciados del tipo que puede entusiasmar a los clientes y traer nuevas categorías y mercados a la vida. ¿Cómo se desarrollan? El genio siempre es atrayente, si uno lo tiene o lo puede conseguir. Afortunadamente la innovación abreva de otros métodos además de la creatividad excepcional.  El resto de los mortales puede buscar ideas analizando metódica y sistemáticamente tres áreas: a) un problema valioso por resolver, b) una tecnología que permita una solución y c) un modelo de negocios que genere dinero. Se podría decir que casi toda innovación exitosa ocurre en la intersección de esos tres elementos. Las empresas que los logran juntar, sintetizar y combinar tienen las mayores probabilidades de éxito.  "Si uno logra averiguar qué es lo que el cliente está buscando, y al mismo tiempo obtener un buen conocimiento de las nuevas tecnologías que están llegando y encuentra un mecanismo para reunir esas dos cosas, va a tener buenos retornos", dice el presidente y CEO de Alcoa, Klaus Kleinfeld.  El proceso de descubrir conocimientos, que se extienden más allá de las fronteras de una compañía para incluir asociaciones que generen conocimientos, es la sangre que da vida a la innovación. Pero si no se tiene un sistema innovador que comprenda los otros elementos descriptos aquí las grandes organizaciones no van a poder innovar con éxito.

EVOLUCIONAR

Las innovaciones en el modelo de negocios, que cambian la economía de la cadena de valor, diversifican el origen de las ganancias y o modifican los modelos de entrega, siempre han sido una parte vital de una fuerte cartera de innovación. A medida que los smartphones y las aplicaciones móviles amenazan con desbancar a muchas empresas de la vieja guardia, la innovación del modelo de negocios se vuelve un problema más urgente: las compañías ya establecidas deben reinventar sus negocios antes de que lo hagan las que están entrando´. ¿Por qué entonces tantos sistemas de innovación se concentran en productos nuevos? Porque la mayoría de las empresas tienen miedo de tocar el modelo de negocios y prefieren no tocarlo hasta que no ven el peligro frente a sus narices. Llegado ese punto, sólo pueden aspirar a que no sea demasiado tarde.  Las empresas líderes, en cambio, combaten esta tendencia de varias formas. Levantan la apuesta en inteligencia de mercado, instalan vehículos de financiamiento para nuevos negocios que no necesariamente encajan perfectamente en su estructura actual. Reevalúan en forma constante su posición en la cadena de valor, cuidadosamente considerando modelos de negocios que podrían agregar valor a grupos prioritarios de nuevos clientes. Auspician proyectos piloto y experimentos que están lejos del negocio central para combatir concepciones estrechas de lo que son y de lo que hacen. Y prueban con nuevas proposiciones de valor y modelos operativos frente a lo que hacen los competidores. Amazon hace esto muy bien al extenderse hacia nuevos modelos de negocios para atender las nuevas necesidades de sus clientes y proveedores. En realidad, ha incluido a muchos de sus proveedores en su base de clientes al ofrecerles una amplia gama de servicios, desde alojamiento de computación hasta gestión de depósitos.  Otra empresa que innova bien es el diario Financial Times, que comenzó a experimentar con su modelo de negocios cuando se aceleró la digitalización de los medios. En 2007 lanzó un innovador modelo de suscripciones que mejoró su relación con anunciantes y lectores. 

ACELERAR

Hay virulentos anticuerpos que debilitan la innovación en muchas grandes compañías. Hay cuidadosos procesos de gobernanza que facilitan a las opresivas burocracias en marketing, legales, IT y otras funciones, la tarea de encontrar razones para detener o demorar aprobaciones. Con mucha frecuencia son las mismas compañías las que obstaculizan sus intentos de innovar. Muchas de las grandes innovaciones que se han producido fueron fruto de sus inconformistas que lograron evadir los procesos de aprobación.  Obviamente, es preciso mantener cierto equilibrio: a la burocracia hay que controlarla pero el apuro por llevar algo al mercado no debe debilitar la colaboración entre las diferentes funciones, los ciclos de aprendizaje y las decisiones claras que permitan innovar. ¿Tienen gerentes con el conocimiento, habilidades y experiencia adecuados para tomar las decisiones importantes en el momento justo para que la innovación se mueva continuamente por toda una organización de modo tal que cree y mantenga la ventaja competitiva sin exponerla a riesgos innecesarios? Además es bueno probar las ideas prometedoras con algunos clientes al principio del proceso, antes de que fuerzas internas impongan modificaciones que debiliten el valor original de la propuesta. Para lograr llevar al final la innovación que se imaginó al principio es necesario derribar las barreras que se levantan entre una gran idea y el usuario final. Las empresas necesitan un gerente bien conectado que se haga cargo de un proyecto y sea responsable del presupuesto, del tiempo al mercado y de las especificaciones, una persona que pueda decir más veces sí que no. Además, el equipo debe ser multifuncional de verdad, no solo en papel. Esto significa que se junten y le den al proyecto el tiempo que se merece para que la cultura de la innovación invada todas las funciones. 


ESCALAR

Algunas ideas, como los productos de lujo y muchas aplicaciones para smartphone están destinadas a mercados de nicho. Otras, como las redes sociales, funcionan a escala global. Analizar explícitamente la magnitud adecuada y el alcance de una idea determinada es importante para asegurar que se consideren los recursos que hacen falta y los riesgos que se corren. La opción, aparentemente más segura, de escalar en el tiempo puede ser una sentencia de muerte. Se deben manejar los recursos y las capacidades de manera tal que un nuevo producto o servicio pueda ser entregado rápidamente con el volumen y la calidad deseados. Las instalaciones de manufactura, proveedores, distribuidores y demás deben estar preparados para ejecutar un lanzamiento rápido.  Por ejemplo, cuando TomTom lanzó su primer GPS con pantalla táctil, en 2004, el producto voló de las estanterías. Para 2006, la línea de dispositivos de navegación portátil de TomTom llegó a tener ventas de alrededor de 5 millones de unidades al año, y para 2008, el volumen anual había saltado a más de 12 millones. "Eso equivale a una penetración de mercado más rápida que la de los teléfonos móviles", dice el CEO y cofundador de TomTom, Harold Goddijn. Si bien el logro inicial de TomTom radicó en combinar un problema bien definido de los consumidores con componentes tecnológicos de amplia disponibilidad, el rápido escalamiento fue vital para el continuado éxito del proceso. 

EXTENDER 

Casi todas las empresas admiten que la innovación necesita de colaboradores externos. Los innovadores exitosos acceden siempre a las habilidades y talentos de otros. Así aceleran la innovación y descubren nuevas formas de crear valor para sus clientes y el ecosistema de socios.  La colaboración inteligente con socios externos va más allá de ir a buscar nuevas ideas y conocimientos. Puede involucrar compartir costos y encontrar nuevas rutas al mercado. Es famoso el hecho que los componentes del primer iPod de Apple fueron desarrollados casi totalmente fuera de la compañía; al manejar con eficiencia esas sociedades externas Apple pudo pasar del concepto inicial al producto comercializable en solo nueve meses.  Los buenos innovadores trabajan mucho para desarrollar los ecosistemas que los ayudan a brindar esos beneficios. Han hecho esfuerzos por convertirse en socios por elección y así aumentan las probabilidades de que las mejores ideas y la mejor gente se acerquen a ellas. Eso exige un método sistemático. Primero, esas compañías descubren con qué socios ya están trabajando. Pocas lo saben. Luego deciden qué redes necesitan para sostener sus estrategias de innovación. Y luego revisar esas redes, extendiéndolas y podándolas según sea necesario y usando incentivos sofisticados y estructuras contractuales para motivar socios de alto rendimiento.

MOVILIZAR

¿Cómo hacen las compañías para estimular, alentar, sostener y premiar la conducta innovadora? Encuentran formas de entretejer la innovación en las fibras de su cultura, desde el corazón hasta la periferia.  Comienzan, como se dijo al principio, con aspiraciones que forjan fuertes conexiones entre innovación, estrategia y desempeño. Cuando una compañía fija objetivos financieros para innovación y define espacios de mercado, el personal se concentra mucho más. A medida que esas aspiraciones se hacen realidad mediante proyectos individuales provenientes de toda la compañía, los líderes de innovación clarifican responsabilidades usando incentivos y premios.  Los cambios organizacionales pueden ser necesarios, no porque existan balas de plata estructurales sino porque promueven la colaboración, el aprendizaje y la experimentación. Las compañías deben ayudar a la gente a compartir libremente ideas y conocimiento, tal vez colocando equipos que trabajen en diferentes tipos de innovación en el mismo lugar, revisando la estructura de los equipos para asegurar que siempre haya sangre nueva y asegurar que las lecciones aprendidas del éxito y el fracaso sean captadas y asimiladas. La colaboración y experimentación internas pueden llevar años hasta instalarse, especialmente en las empresas grandes con fuertes culturas y formas de trabajar que, en otros aspectos, pueden haberles dado muy buenos frutos. Algunas empresas instalan "garajes de innovación" donde pequeños grupos pueden trabajar en proyectos importantes sin las limitaciones del normal entorno laboral mientras crean nuevas formas de trabajar que pueden ser escaladas y absorbidas luego por la organización. La NASA, por ejemplo, tiene diez centros de campo. Pero la agencia espacial confía en el Ames Research Center, en Silicon Valley, para mantener lo que el ex director Pete Worden, llamó "el carácter de los rebeldes" para funcionar como "un laboratorio que es parte de una organización mucho más grande". Las grandes empresas no se reinventan con facilidad como innovadoras líderes. Tienen demasiadas rutinas fijas y factores culturales que se interponen. Para aquellas que hacen el intento, la excelencia en innovación suele realizarse en un esfuerzo en varias capas que toca la mayoría sino todas las partes de la organización. La investigación de McKinsey sugiere que cualquier compañía que busca hacer este viaje aumentará sus probabilidades de éxito estudiando profundamente y asimilando adecuadamente las prácticas de los grandes innovadores. Tomadas en su conjunto, ellas forman un sistema operativo fundamental para la innovación dentro de la cultura y estructura organizacional de una compañía.

martes, junio 14, 2016

Muhammad Ali emprendedor: cinco lecciones de vida


Mohammed Ali

 “Vuela como una mariposa y pica como una abeja. Golpea mi amigo, golpea”. Es una de las citas que más se recuerdan de Muhammad Ali, la gran leyenda del boxeo que falleció el 3 de junio de 2016 a los 74 años de edad.

De Ali nos quedamos con el peso de su figura, del que probablemente sea uno de los deportistas más importantes de la historia de Estados Unidos. Y como no podía ser de otra forma, también con una buena cantidad de frases capaces de inspirar a otros. También a los emprendedores.  Citas que se cuelan aquí y allá en un buen número de entrevistas y que hablan de superación personal, de ser capaz de asumir riesgos, de confianza y aunque parezca mentira, también de humildad.

Tu tiempo es limitado, aprovéchalo al máximo

No parece una gran revelación. Más bien suena a cliché, a término manido repetido una y mil veces. Sin embargo en la entrevista que Ali concede a Playboy en 1975, lo expresa de una forma diferente.

“El hombre que mira al mundo con 50 años de la misma forma que lo hacía cuando tenía 20, ha desperdiciado 30 años de su vida.”

Ali era un firme convencido de la ética del trabajo y en cómo sólo podemos obtener resultados si nos esforzamos al máximo. En su libro “The sound of a butterfly” decía lo siguiente:

“Si hubiese sido un basurero, hubiese recogido más basura y más rápido que cualquier otro. Si hubiese sido un periodista que hubiera tenido la oportunidad de pasar el día con Muhhamad Ali, habría repasado todas las entrevistas anteriores a la mía y hubiese leído todos los artículos publicados hasta la fecha para ser capaz de tener una perspectiva diferente”.

Y sí, esa es la esencia. Como nuestro tiempo es limitado, no importa lo que estemos haciendo, tenemos que dar el máximo para sentirnos satisfechos de nuestro trabajo.

Ten confianza

Muhammad Ali exudaba confianza por cada poro de su piel. A veces de forma exagerada e incluso peligrosa. Algunas de las citas que recuerdan esa fe ciega en sus posibilidades son las siguientes:

“Soy joven; soy guapo, soy rápido. No puedo ser vencido”.
“Es difícil ser humilde cuando eres tan grande como yo”.
“Si sueñas en vencerme, será mejor que te despiertes y pidas disculpas”.
“Soy el más grande. Lo dije incluso antes de saber que lo era”.

Por supuesto muchas de estas frases eran intencionadas, pensadas para ganar titulares de prensa, “amedrentar” a sus rivales y por qué no, hacer crecer su leyenda. Mucho más interesante para el mundo de los emprendedores resulta esta declaración realizada en una entrevista para eBony.

“Aquel que no tiene el valor necesario para correr riesgos, no conseguirá nada en la vida”

En “Seis ragos que tienes que tener para inspirar más confianza” hablamos precisamente de eso, de ser genuino, humilde, de tener ser capaz de asumir riesgos.
No importa quién seas. Entrenar no es divertido.

Muhammad Ali es el primero en reconocer la falsedad del mito: no, entrenar no es divertido. Y sí, hay muchas otras cosas más interesantes que entrenar y prepararte para la competición.

Las personas que niegan esta máxima y que son incapaces de reconocer que a veces odian entrenar (o estudiar o cualquier otra cosa que requiere sacrificio y esfuerzo), mienten. El campeón de los pesos pesados lo decía de esta forma en 1978 en una entrevista para Newsweek.

Odio cada minuto. Pero siempre me digo a mí mismo: sufre ahora y vive el resto de tu vida como un campeón.

La lección es clara. No sólo todo en lo que queremos ser brillantes requiere esfuerzo, sino que realmente tendremos que llegar a odiarlo hasta que podamos dar el máximo. La excelencia, en cualquier campo de nuestra vida, no es precisamente un camino de rosas.

A veces pierdes

No importa lo bueno que seas en tu campo. A veces simplemente pierdes. Incluso Muhammad Ali, capaz de firmar un record de 56 victorias y 5 derrotas, tuvo que aceptar el hecho de que algunos días, había alguien al otro lado del ring que había hecho las cosas mejor que él.

Precisamente por ello y en 1973, minutos antes del combate que le enfrentaría con George Foreman, se expresó de esta forma ante los medios de comunicación.

Nunca pensé que podía perder, pero ahora que ha pasado, lo único es hacerlo bien. Esa es mi obligación con todos los que creen en mí. Todos tenemos que aceptar derrotas en la vida.

Desde luego no fue su cita más elaborada. Pero tenía un mensaje que sigue siendo muy válido. La única forma de superar un fracaso es volver a intentarlo una y otra vez, hasta 
hacerlo bien.

La importancia de la amistad

li era un ferviente defensor de la idea de amistad. Siempre supo rodearse de un círculo muy estrecho de colaboradores que ante todo, eran sus más grandes amigos. En una entrevista con el periodista Harold Bell decía lo siguiente:

La amistad es un regalo sin precio que no puede ser comprado, ni vendido; su valor es mayor que una montaña de oro. Porque el oro es frío y sin vida, no puede ver, ni escuchar, cuando hay problemas no te va a animar, no puede confortarte o ofrecerte su mano. Así que cuando pidas a Dios un regalo, da las gracias si no envía diamantes, perlas o riquezas, sino el amor de los verdaderos amigos.

¿Quién lo hubiese dicho verdad? Ali podía ser tremendamente cursi si se lo proponía. Pero lo curioso es que a menudo se habla de la soledad del campeón, del líder que no necesita consejos, del visionario que está por encima o que ve las cosas de forma diferente. Y sin embargo todos tienen la misma necesidad: rodearse de las personas adecuadas.

lunes, junio 13, 2016

Atraer, desarrollar y comprometer talento a través de la creatividad


Mucho se viene hablando de innovación estos últimos años. Los cambios en el entorno económico, tecnológico y geopolítico han sido tan convulsos que las empresas y todo tipo de organizaciones, públicas o privadas, lucrativas o no, se han visto obligadas a replantearse muchos de sus productos, servicios, procesos e incluso modelos de negocio.

De pronto a las empresas les ha interesado innovar y, para ello, han solicitado a sus equipos, a sus personas, a sus trabajadores que despierten su capacidad creativa.

En algunos casos ésta estaba ya entrenada. En muchos otros casos, la creatividad de la gente estaba dormida, anestesiada, descreída.

Muchos directivos han confundido innovación con investigación y desarrollo, la conocida I+D. Poco importa que se le añada la i de innovación. Y han restringido la innovación a los departamentos técnicos o de marketing. Esta es solo una vertiente de la creatividad. Las empresas más innovadoras del mundo tienen una visión mucho más amplia. La innovación debe poder ocurrir a cualquier nivel jerárquico y en cualquier departamento de la empresa. Pero para lograrlo, es preciso un cambio cultural importante. Este cambio cultural supone que los miembros de una organización hayan vivido y experimentado en sus propias carnes que su creatividad importa y es tenida en cuenta.

Sabemos mucho acerca de la creatividad pero las empresas saben relativamente poco porque no ha sido ésta un área de gestión en la que se ha invertido demasiado.

Despertar la creatividad de las personas requiere una serie de condicionantes fundamentales. El primero es erradicar la cultura del miedo. Amancio Ortega insiste en que Inditex está donde está gracias a una cultura de aceptación del error. O, lo que es lo mismo, eliminación del miedo a equivocarse. En Procter, tienen un mantra: fracasa pronto, fracasa rápido y fracasa barato. Pero fracasa. La innovación lleva asociado un importante grado de error y las empresas que saben aprovechar la creatividad de sus personas tienen esto en cuenta: el error forma parte del proceso, se asignan y reparten sus consecuencias sin que eso entrañe un riesgo para la carrera profesional de las personas y, finalmente, se dota a la empresa con los mecanismos apropiados para detectar los errores que toda actividad creativa lleva asociada. Las empresas más creativas del mundo son empresas que, ante todo, se equivocan a veces pero, especialmente, están entrenadas para descartar. El arte de innovar no es el de acertar, que también, sino el de descartar las ideas malas antes de que cuesten demasiado dinero.

Las empresas que favorecen la creatividad de sus personas son organizaciones que atraen talento. La gente quiere y desea trabajar en ellas. La explicación es muy simple. Juntamente con el amor, la creatividad es una de las facultades básicas en la autorrealización de un ser humano. Es una necesidad vital y hay pocas organizaciones que permitan desplegarse en tal ámbito. La creatividad va asociada al placer intelectual. Crear, inventar, descubrir es placentero y, aunque es una tarea dura y ardua a veces, produce elevados niveles de satisfacción profesional. Por eso las empresas donde la creatividad se incentiva, donde las ideas de las personas son escuchadas, son empresas que retienen mucho mejor el talento. Aviso para navegantes en departamentos de recursos humanos: una persona que haya experimentado cómo su creatividad puede desplegarse en su trabajo difícilmente cambiará de empleo ni aunque le ofrezcan un 30% más de salario. Obviamente, siempre que ese salario supere un mínimo higiénico de subsistencia. ¿Por qué? Pues simplemente porque la satisfacción profesional que experimenta la persona es tan elevada que no va a querer arriesgarse a perder autorrealización por dinero. Son pocas las empresas que lo tienen en cuenta. Pero es algo fundamental. La creatividad es un factor de retención fenomenal. No solo sirve para que la empresa produzca ideas, sino también para retener el talento, a las mejores personas.

Sin embargo, hay algo aquí a ser tenido en cuenta. Desde recursos humanos debemos asegurarnos de que tenemos a las personas idóneas y en los puestos idóneos.

¿A qué se refiere las personas idóneas? Se refiere a que tanto su perfil sea adecuado para nuestra organización (eso lo sabe todo el mundo) como a que nuestra organización sea idónea para el suyo (extremo este que es normalmente ignorado). ¿A qué me refiero? Pondré un ejemplo. Cuando yo tenía 25 años entré a trabajar en una empresa como responsable de una conocida marca de whisky. Yo no bebo, no me gusta la noche desfasada y además me preocupa el impacto social del alcohol y sus efectos sobre las adicciones o los accidentes de tránsito. La empresa no era idónea para mí a pesar de que mi perfil sí era idóneo para esa empresa. ¿Cuál fue el resultado? Pues que yo, una persona que he sido altamente creativa en otros entornos y ámbitos, fui incapaz de desarrollar una creatividad continuada, duradera y de valor. Experimenté un fracaso profesional de importante calado. ¿Fallaba la persona? No. Yo era el mismo que ahora. Sencillamente se producía la ausencia de algo elemental para que la creatividad de la persona sea sostenible en el tiempo y que se denomina “motivación intrínseca”. La motivación intrínseca no puede ser articulada ni incentivada por la organización. Es solo inherente a la persona. A sus gustos, a sus aficiones, a sus preferencias, a sus querencias.

Por eso es fundamental asegurarnos de que nuestra empresa es la idónea para las personas que contratamos y no sólo personas idóneas para las tareas y funciones a cubrirse en un puesto de trabajo. Es obvio que todas las tareas y trabajos tienen momentos pesados o aburridos o tediosos. Incluso la tarea de un músico o un pintor, cualquier artista, incluye fases que el propio creador aborrece. Pero en su conjunto, el artista disfruta con su trabajo porque se dedica a algo que le llena.

Lo mismo sucede con los puestos de trabajo. Debemos asegurarnos de que tenemos a las personas asignadas a puestos y tareas que les placen, que les atraen y que disfrutan enormemente con ellas. No siempre es así. Debido a la enorme deficiencia del sistema educativo, son miles los jóvenes que acaban metidos en carreras universitarias o formación profesional que en realidad no desean cursar. A veces movidos por deseos de los padres y otras veces porque no les queda más remedio, estudian algo que no les llena. Como consecuencia, trabajarán en profesiones donde difícilmente van a sentirse realizados.

Las empresas que deseen personas creativas han de aprender a detectar cuáles son esos perfiles. Gente que se dedica a lo que no le gusta. Y tienen dos opciones: no contratarlos o bien, si consideran que tienen un talento en potencia, explorar hacia qué departamentos o responsabilidades desea esa persona moverse. La reorientación profesional supone un esfuerzo para la persona y, por supuesto, para la organización. Pero ¿puede alguien imaginar el agradecimiento y la motivación que una persona sentirá por la empresa que ha sacado lo mejor de él o ella, y que le ha ayudado a redirigir su carrera profesional hacia dónde deseaba?

Pensamos poco en la creatividad como factor de retención y tendemos solo a considerarla una fuente de ideas e innovación. Pero en la vida todo tiene un efecto y consecuencia que se mueven en un doble sentido. De dentro hacia fuera y de fuera adentro. Es lo mismo con la creatividad. Las personas darán mucho, muchísimo a la organización si ésta decide invertir en su creatividad.

Y, por último, siguiendo el título del artículo y uno de los grandes objetivos de las distintas áreas de Human Age de este año, hablemos de desarrollar.

La creatividad no es ni mucho menos una capacidad estática, sino dinámica. La creatividad se puede aprender, desarrollar, mejorar, ejercitar. Los caminos de la creatividad son, por concepto, infinitos. Sin embargo, es posible acotaros, dirigirlos, enfocarlos adecuadamente hacia los objetivos estratégicos de la organización.

Se trata, simplemente, de dedicar algo de recursos y tiempo. No solo a la formación, sino a la liberación de tiempo. La creatividad y la innovación requieren parar el reloj. Y las empresas, alocadas por la tiranía del corto plazo, no tienen tiempo. Tienen demasiada prisa. Y esas prisas, trasladadas a las personas, son acérrimas enemigas de la creatividad. Las empresas más innovadoras del mundo destinan espacios y momentos a la creatividad, permitiendo que la persona salga momentáneamente de su estresante día a día. Existen muchos modos de hacerlo: desde liberación de horas, hasta liberación de días o incluso meses. Google opta por lo primero; BMW por lo último, por ejemplo. A ambas les funciona. El caso es liberar tiempo.

Una última palabra para los incentivos. Si algo sabemos en economía es que las personas funcionamos mediante incentivos. Siempre es así. Los incentivos mueven la voluntad humana, que fácilmente tiende a la desidia o la inacción.

¿Cuál es el mejor incentivo en innovación y creatividad? Se ha demostrado que no es el dinero para la persona, sino el dinero para realizar más proyectos profesionales. Las empresas más innovadoras del mundo premian las buenas ideas con recursos para nuevos proyectos. Son las que mejor han comprendido que fomentar e invertir en creatividad les produce no sólo resultados, sino que se convierte en el mejor factor de retención del talento.