La tecnología no es la
única pasión de los millennials. Tienen otra que les genera más "me
gusta" internos: viajar.
La industria turística les analiza con lupa porque sabe que
su crecimiento irá unido a los deseos de experimentar de esta generación. El
informe Global Millennial Traveller, elaborado para Expedia por Future
Foundation, analiza los hábitos y tendencias de viaje de este grupo. "Han
crecido con conexiones globales más profundas que las del resto y tienen un
fuerte deseo de enriquecer sus vidas a través de los viajes", asegura Gary
Morrison, vicepresidente senior de Brand y Retail en Expedia.
Reconocimiento social, control de la situación, aversión al
riesgo, personalización y ligereza ante la privacidad. Así actúan los
millennials según el informe, que ha analizado ocho mercados: Australia,
Estados Unidos, Brasil, China, Alemania, Francia, Corea del Sur y Reino Unido.
¿Cómo elegir un
destino?
Reproduzcamos los pasos de un miembro de esta generación a
la hora de elegir un destino. El codiciado millennial, que ha crecido con el
mundo a su alcance a través de Internet y las redes sociales, necesita recibir
inspiración de amigos, marcas y otras fuentes de confianza para fijar una lista
de lugares. El 42% afirma que las fotos que ven colgadas de destinos en las
redes sociales tienen una fuerte influencia a la hora de elegir dónde pasar las
vacaciones. El porcentaje se incrementa en países como Estados Unidos, donde la
cifra llega al 50%.
De hecho esa búsqueda no es nada tediosa, pues un alto
porcentaje se entretiene de forma activa mediante la recopilación y el
intercambio de imágenes de las cosas que les interesan.
Está claro que la autenticidad les preocupa y mucho. Su
viaje tiene que tener un impacto positivo y ser original, pero, sobre todo, sus
fotos deben ser comentadas. Allá con su conciencia aquel que haga caso omiso a
esa imagen colgada de comida perfecta o playa paradisíaca, porque habrá
decepcionado al 31% de los millennials.
Este tipo de viajero no puede correr riesgos. Ni quiere ser
el primero en probar algo nuevo o de lo que no tiene referencia ni quiere
viajar solo. Para ellos es importante compartir la experiencia con amigos,
pareja o, en menor medida, con la familia.
¿El mejor modo de
evitar riesgos?
Controlar la situación. Más del 60 por ciento quiere
mantener todo bajo control y se sirven de la tecnología para conseguirlo. Para
ello, es necesario que todo sea flexible, ya que un viajero millennial tiende a
modificar su itinerario.
El auge del Big Data y la conectividad han puesto sobre la
mesa el problema de la privacidad. Lo de problema es relativo: el 40% está
preparado para proporcionar datos personales a los agentes de viajes online si
a cambio reciben descuentos u ofertas personalizadas. Además, creen que la
protección de datos está sobrevalorada, ya que el 80% quiere que les envíen
recomendaciones sobre destinos para las vacaciones en función de sus
preferencias, necesidades y presupuesto.
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